España es el país desarrollado donde más aumenta la mortalidad asociada a la dicta

La tasa de mortalidad por enfermedades de tipo no infeccioso derivadas de la alimentación sigue creciendo en España con más fuerza que en los demás países de la Comunidad Europea, si se exceptúa Grecia, y de todo el mundo desarrollado. Así lo constata una estadística que la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentará ante la Conferencia Internacional de Nutrición (CIN), que el Papa Juan Pablo 11 inaugurará el próximo sábado en la sede de la FAO, la organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.

El deterioro de los hábitos alímenticios de los españoles queda reflejado en el aumento de casí el 5% que, según la OMS, ha experimentado el índice de mortalidad mencionado durante el período 1990-1991. Se trata de un valor relativo y, por tanto, no implica que la dieta de los españoles sea más mortal que, por ejemplo, la de los norteamericanos. Pero sí que nuestro país va a contracorriente de una tendencia general a corregir los riesgos del exceso de comida asociados al desarrollo económico.La tasa de mortalidad vinculada a una nutrición desequilibrada dismunuye, en efecto, en todos los países desarrollados, salvo en Alemania, Austria y Portugal, donde registra incrementos inferiores al de España, que, en la tabla de la OMS, sigue de inmediato a Trinidad Tobago. Con aumentos de la mortalidad aún mayores, aparecen Venezuela, Costa Rica y México, y los países del Este europeo.

Un informe redactado por los Ministerios españoles de Sanidad y Agricultura reconoce este deterioro de la dieta del español medio, que se concreta en una tendencia al exceso de consumo de grasas y proteínas, sobre todo animales, y a un déficit de fibras vegetales e hidratos de carbono. También se constata una tendencia al incremento del consumo de bebidas alcohólicas, con la excepción del vino.

El informe, fechado en el pasado junio, es el remitido a la Conferencia de la Nutrición, organizada por la FAO y la OMS, que han recabado un estudio similar a cada uno de los aproximadament.e 150 países que, durante la próxima semana, asistirán en Roma a la CIN.

La comparación entre la dicta media de un español y las recomendaciones de la OMS y la F.A0 pone de manifiesto que "casi la mitad de la grasa procede de los alimentos animales y otro tanto de los aceites vegetales, y su consumo supera en un 82% a las recomendaciones. El gran consumo de pescados y aceites vegetales da como resultado una generosa ingestión de ácidos grasos polisaturados. El déficit de carbohidratos se estima en el 12% y lo mismo sucede a la fibra alimentaria y casi en la misma proporción (14%). El consumo de proteína es de 90,5 gramos y supera en un 71% las recomendaciones dietéticas", se lee en el informe español.Efectos patológicosAdemás, una tendencia reciente a la reducción de la cantidad de alimentos ingeridos está teniendo en España el efecto adicional de incrementar "el desequilibrio a favor de las grasas y de las pro teinas y en defecto de los hidra tos de carbono".Los efectos patológicos de esta dieta son evidentes. Por lo que se refiere a las cardiopatías primera causa de mortalidad en España (44,75% de los casos), el informe destaca que "la evolución de los niveles de colesteremía (exceso de colesterol) en diversas comunidades españolas indican cifras preocupantes... ligadas a los cambios dietéticos".También se cuantifican relaciones entre la dieta y el cáncer, segunda causa de mortalidad de los españoles (22% de los fallecimientos). Así, se atribuye a factores alimentarios un 35% de loscarcinomas de intestino grueso, que "son los que han experimentado mayor aumento en los últimos años". No obstante, los tumores más extendidos siguen siendo los de pulmón (25,2% en los hombres y 16,4% en las mujeres