El PP quiere retrasar el Código Penal para que el PSOE no lo rentabilice

El Partido Popular se muestra abiertamente contrario al propósito expresado por el Gobierno de aprobar el nuevo Código Penal en los 12 meses escasos que restan de legislatura si ésta se agota sin convocatoria previa de elecciones. Izquierda Unida y el Centro Democrático y Social están dispuestos al debate, pero piden una razonable seguridad de que el Gobierno no imposibilitará el proyecto con un adelanto electoral en los próximos meses. Como telón de fondo está el recelo del PP de que el nuevo código sea aprovechado por el PSOE como baza electoral.

Tomás de la Quadra, ministro de Justicia, no ha podido garantizar esa pretensión en sus conversaciones con la oposición. La semana pasada concluyó una ronda de negociaciones entre el titular de Justicia y miembros de su departamento con los grupos. El PP ha adoptado una postura beligerante frente al propósito del Gobierno, que desea acelerar el debate del nuevo Código Penal e incluso tenerlo listo antes de que concluya la legislatura.En opinión de Rodrigo Rato, portavoz del Grupo Popular, "no estamos dispuestos a que se haga un Código Penal en cinco meses; es, un proyecto con la suficiente envergadura como para trabajar en él durante dos años o más, y eso exige que se hubiera traído al Congreso al principio de la legislatura".

Para Rato, las "prisas" gubernamentales esconden "un claro propósito electoralista", y rechaza la idea barajada por el Grupo Socialista, y aceptada en principio por IU y. CDS, de habilitar el mes de enero, de vacaciones parlamentarias, para que la ponencia estudie y debata el nuevo Código Penal. Rato asegura que existe un compromiso para que puedan presentarse enmiendas al proyecto del Gobierno hasta el mes de febrero próximo.

Izquierda Unida, según su portavoz, Nicolás Sartorius, entiende como "importante" que en esta legislatura pueda quedar aprobado el nuevo código, pero pide "una mínima garantía de que no quede truncado por una convocatoria electoral". El ministro De la Quadra, no ha podido ofrecer esta garantía al aducir que la convocatoria de elecciones está en las exclusivas manos del presidente de Gobierno.

Enmiendas parciales

Izquierda Unida, que también está de acuerdo en trabajar durante el mes de enero, entiende que el Código Penal "debe alcanzar un amplio consenso, pero no es imprescindible la unanimidad en todos los temas".Según Sartorius, IU no presentará, en principio, una enmienda a la totalidad ya que eso sería tanto como pedir la devolución del proyecto, pero sí tiene preparada una amplia batería de enmiendas parciales. El portavoz de IU entiende que el debate debe centrarse en dos docenas de temas políticos que recoge el Código Penal, y que el resto de las cuestiones pueden quedar reservadas a los juristas y a los técnicos.

Para Sartorius, cuestiones como el aborto, los delitos económicos-sociales, el delito ecológico, la xenofobia, el cumplimiento,de las penas para terroristas y narcotraficantes, constituyen algunos de los aspectos sobre los que es necesario el acuerdo y en los que no están dispuestos a ceder posiciones que no sean progresistas.

José Antonio Souto, asegura que el CDS también está dispuesto a debatir el nuevo código, aunque. muestra la misma cautela sobre la utilización electoral del debate y, sobre todo, ante la posibilidad de que los trabajos queden interrumpidos por las elecciones.

Representantes del Grupo Socialista admiten que el debate del código en las cámaras puede brindarles la oportunidad de transmitir mensajes progresistas a la ciudadanía sobre una serie de temas sensibles para la opinión pública. Las mismas fuentes creen que las posiciones del PSOE conectarán mejor con amplias capas de la población de las que pueda ofrecer el PP.