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La crisis del SME

La peseta y el escudo se devalúan un 6%

Lluís Bassets

Tras once horas de intenso debate, el Comité Monetario ha decidido en una lluviosa madrugada devaluar un 6% la peseta española y el escudo portugués frente al resto de las divisas del SME. Además, en la resolución final, el Comité conmina a los dos países a adoptar fuertes medidas de ajuste. A España le recomienda, también, que levante inmediatamente las medidas de control cambiarlo impuestas por el Banco de España el 23 de septiembre.El Gobierno español asume ese compromiso, y eliminará "de modo inmediato las medidas que encarecían la financiación en pesetas a no residentes", según señala una nota que difundió Economía en la madrugada de hoy. El ministro de Economía, Carlos Solchaga, aseguró en otro comunicado que "el Gobierno valora positivamente el reajuste que se ha producido en la parrilla de paridades del SME". Además, reconoce que "era evidente que la devaluación del 5% no había sido entendida por el mercado corno suficiente para restaurar nuestra competitividad".

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La devaluación del 6% decidida hace unas horas supone que las 72,6 pesetas por marco de límite mínimo de fluctuación que existía el viernes se convierten, desde el lunes, en la cotización central de la peseta en el SME. Sobre ella se aplicará la banda de fluctuación, arriba y abajo, de otro 6%.

Las once horas de debate en Bruselas fueron seguidas, en Madrid, por el ministro de Economía, Carlos Solchaga, el gobernador del Banco de España, Luis Ángel Rojo, y el secretario de Estado de Economía, Pedro Pérez, desde el despacho del ministro.

A solicitud de España

La reunión del Comité fue solicitada por el Gobierno español el pasado jueves, ante la imposibilidad de seguir sosteniendo la peseta dentro del Sistema Monetario Europeo (SME). Durante el jueves y el viernes, el Banco de España tuvo que destinar importantes recursos para evitar un desplome de la divisa española. La primera sugerencia la formuló el ministro de Economía a. su homólogo francés Michel Sapin, en la cumbre hispano francesa celebrada en Albi el pasado, jueves. Solchaga comunicó también al ministro alemán de Finanzas, Theo Waigel, la necesidad de reajustar las paridades. Las autoridades alemanas admitieron que era inevitable un reajuste sin esperar la entrada de la lira italiana. Todo apunta a que esta reincorporación no se producirá hasta bien entrado el año próximo.

El mismo jueves por la noche el director general del Tesoro e pañol, Manuel Conthe, comunicó al presidente del Comité Monetario, el responsable del Tesoro francés Jean Claude Trichet, la necesidad de convocar una reunión de este organismo ante las crecientes dificultades para mantener la peseta dentro del SME. El viernes a mediodía Conthe confirmó a Trichet la solicitud de reunión del Comité por la noche, España comunicó sus planes a Alemania, Portugal y el Reino Unido.

Durante el jueves y el viernes el Banco de España efectuó masivas intervenciones en apoyo de la peseta, en cantidades muy superiores a las manejadas hasta ahora, cifradas en 300.000 millones de pesetas para el viernes.

El desencadenante de la presente tormenta se inició el pasado jueves con el alejamiento de la corona sueca del SME. Aunque la divisa sueca no pertenece al Sistema, las autoridades de aquel país se habían comprometido a ligar el cambio de la corona al ecu con el objetivo de facilitar el ingreso de Suecia en la CE. El Banco de Suecia llegó a fijar unos tipos del 500% en la anterior tempestad monetaria de septiembre para mantener la paridad, pero finalmente tuvo que claudicar, lo que significó una devaluación de más del 10%.

Efecto dominó

La caída de la corona sueca desestabilizó el jueves a las coronas danesa y noruega por tratarse de un espacio económico con intensas vinculaciones. Las autoridades de estos dos países se vieron forzadas el viernes a subir sustancialmente sus tipos de interés. Ello provocó un flujo de dinero hacia el marco alemán, que se vio reforzado. La peseta, junto a la libra irlandesa y el escudo portugués, -las tres monedas más debilitadas del Sistema- se encontraron con serias dificultades para mantenerse dentro del sistema monetario. Finalmente, la libra irlandesa no fue devaluada, tal vez por la coincidencia con la campaña electoral en ese país.

La reunión fue programada para las tres y media de la tarde, hora en que prácticamente todos los participantes habían ya entrado en el Centro Albert Borchette de Bruselas, donde el Comité celebra sus reuniones habitualmente. Sólo los representantes españoles, el director general del Tesoro, Manuel Conthe, y el subgobernador del Banco de España, Miguel Martín, no habían sido vistos a la entrada del Centro.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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