Médicos británicos piden a los tribunales dejar morir a un joven en coma

Los médicos que mantienen con vida artificialmente desde 1989 a Tony Bland, de 22 años, han pedido permiso al Tribunal Supremo de Gran Bretaña para dejarle morir. Los padres del joven, que resultó aplastado en el desastre del estadio de fútbol de Hillsborough (Sheffield, Reino Unido), confían en que se permita morir a su hijo en vez de mantenerlo en un estado vegetativo que puede prolongarse durante 30 años. "Si le quitan los tubos tendrá un final digno", ha declarado Allan Bland.Tony fue aprisionado por una avalancha humana contra una valla de seguridad del estadio y desde entonces está inconsciente por la falta de riego sanguíneo cerebral. En los incidentes murieron 95 personas.

Este caso sería un procedente para un millar de pacientes en similar situación. Los médicos han pedido al Tribunal Supremo si pueden desconectar el sistema que mantiene la vida de Bland sin incurrir en asesinato u homicidio. Se espera una decisión judicial en tres días. Según los abogados del hospitaI Airedale, el escaner cerebral de Bland muestra que sus sectores de pensamiento están atrofiados. Al paciente hay que limpiarle la boca cada dos horas y retirarle las secreciones. Si se le suprimiera la alimentación artificial moriría en dos semanas.