El centro del desastre
Muchísimas gracias por el reportaje que apareció en EL PAÍS de Madrid el 8 de octubre de 1.992, titulado El centro del desastre. Los que sufrimos el caos y el desastre en que se ha convertido la zona centro de esta ciudad sentimos una gran satisfacción al ver reflejados y denunciados estos problemas en la prensa y los medios de comunicación. Esto nos hace concebir esperanzas de que la solución llegue algún día.Lo que probablemente ya no sea tan fácil de solucionar es el humo y el carácter de los madrileños de esta zona, que, impotentes y cabreados ante la ineficacia absoluta del Ayuntamiento y el impresentable concejal que nos ha tocado en desgracia, nos hemos convertido en unos amargados y malhumorados permanentes.
Por tanto, les ruego sigan denunciando tanta ineficacia y mal hacer por parte de los responsables municipales, que se conforman con montar el numerito cerrando locales cuando tienen la calle hecha un auténtico vertedero. Lo que queremos los vecinos de esta ciudad es que cuando salimos a la calle no nos encontremos camellos, yonkis, obras y basuras a más no poder llenando plazas, portales y lo que eran jardines. Y que vuelva a ser el centro una zona comercial y de diversión que admiraba a los turistas y nos enorgullecía a los vecinos. Muchas gracias y sigan insistiendo, poniendo el dedo en la llaga-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.