La limpieza y la reforma de la plaza de Oriente, órdagos del PP para 1993

La limpieza de la ciudad contará el año que viene con 62,2 millones diarios, un 17% más que en 1992. Y comenzará la reforma de la plaza de Oriente, que debe ser la obra emblemática del PP. Esos son los órdagos contenidos en el presupuesto del Ayuntamiento para 1993, del que ayer se conocieron nuevos datos. Además, las juntas controlarán un 20% menos de dinero, (Centro, con un 40%, sufre el mayor recorte) y los concejales de Sanidad y Seguridad apenas podrán hacer algo más que pagar a sus médicos y policías. La Gerencia de Urbanismo cambia su fórmula para obtener ingresos.

Las partidas para limpieza de las calles y transporte urbano son las únicas que destacan por su incremento en el gris panorama de recortes que ofrece el presupuesto municipal de 1993. El concejal de Limpieza, Luis Molina, dispondrá de 22.715 millones de pesetas para barrer Madrid, casi 3.400 más que en este ejercicio.Además, todo el dinero para esta labor estará bajo el control del concejal, quien ha centralizado los pagos a las contratas, que antes se ejecutaban desde las juntas según el principio de que quien paga, exige. Este incremento es la causa de que el presupuesto de la Concejalía de Medio Ambiente, de la cual depende Limpieza, se haya incrementado en un 34%.

El área de Circulación también sube de forma espectacular, un 42%. El motivo es la partida destinada a "transporte urbano" incluida en su presupuesto, y que asciende a 16.779 millones, 6.600 millones más que este año. Este dinero, en teoría, debería constituir la aportación municipal al Consorcio regional de Transportes, pero esta decisión está aún en el aire.

El portavoz socialista, Juan Barranco, entiende que esta partida equivale a la deuda que tiene el Ayuntamiento con el consorcio desde 1990. "La negativa municipal a aportar este dinero ha causado ya que el Metro haya dejado de invertir 2.600 millones de pesetas y que la EMT no haya podido comprar 200 autobuses", comentó.

Lugar de honor en los presupuestos ocupan los 500 millones para la reforma de la plaza de Oriente, según informó ayer Abc. El concejal de Urbanismo, José Ignacio Echeverría, aseguró el martes que esta obra "va a ser emblemática" para el Gobierno municipal, que tiene intención de empezarla el próximo verano. Sin embargo, del presupuesto de la Concejalía de Obras ha desaparecido la partida para pasos subterráneos.

Sólo para la nómina

Más desapariciones. Las concejalías de Sanidad y Cultura tendrán cero pesetas para invertir el próximo año, y este mismo capítulo se reduce un 94% en la de Educación,, Juventud y Deportes y un 90% en la de Seguridad y Policía. Municipal.

El concejal de Seguridad, Carlos López Collado, no tendrá mucho qué pensar el próximo año. Sólo tiene un 2% del presupuesto para gastarlo en otra cosa que no sea la nómina de los policías. Un chascarrillo corría ayer por la Casa de la Villa: "Dentro de nada habrá policía de barrio en todo Madrid porque todos los agentes tendrán que patrullar a pie". Al concejal de Sanidad le ocurre otro tanto: el 96% de su presupuesto es para personal. Y al de Cultura, que se ha convertido en responsable de un área marginal.

La Gerencia de Urbanismo ha reducido un 34% su presupuesto, y para mantener el tipo apuesta por vender 13.500 millones de pesetas en suelo para viviendas de precio tasado. De ahí debe salir casi la mitad de sus ingresos para 1993. Gerencia ha reducido su listón al fracasar este año en su intento de vender 42.000 millones de suelo para viviendas libres y oficinas.

Los presidentes de Junta manejarán un 20% menos de dinero, fundamentalmente tras perder las competencias de limpieza. Según los cálculos de Izquierda Unida, de los 3,5 millones por Junta y día que les corresponden, un 50% se destinará a gastos de personal (el 70% en el caso de Chamberí y Retiro) y un 8% a inversiones. El concejal de Centro, Ángel Matanzo, sufre el mayor recorte: casi un 40%, y su Junta, que el pasado año era la primera en presupuesto, es ahora la novena. Chamartín, cuyo presidente, Miguel Cantos, participó en la comisión que elaboró los presupuestos, será la Junta con más dinero. Este año era la séptima.

Más cifras. Se modifican levemente las partidas dedicadas a tratamiento del agua (-2%) y control de tráfico (+2%). Varían más las de asistencia social (-10%) y pavimento (-12%) y bajan radicalmente fiestas (-35%), divulgación cultural (-53%) y centros culturales (-43%).

Juan Barranco, quien ayer hizo una evaluación de urgencia de los presupuestos, criticó el incremento de los intereses de la deuda, que pasan de 19.000 a 30.700 millones. El portavoz socialista aventuró que los años venideros serán peor por esta causa. "La carga financiera va a impedir que crezca la inversión en este mandato y parte del próximo", dijo.

Sin embargo, Barranco defendió al Gobierno socialista de la Comunidad de Madrid, que tiene previsto aumentar su deuda el próximo año un 25%. Según Barranco, la diferencia está en que el dinero que obtiene el Ayuntamiento de los bancos y "de los impuestos no se sabe dónde va". "Ese es el gran fracaso del PP, que nadie acierta a ver qué ha hecho, aparte del faro de Moncloa".

El alcalde, José María Álvarez del Manzano, hablé ayer de sus previsiones económicas en Onda Cero: "Hacer un presupuesto es lo más difícil en cualquier época, sobre todo cuando ésta es de crisis", comentó. Según el alcalde, sus "presupuestos son los mejores en estos momentos de depresión, ya que la austeridad que se impone el Ayuntamiento no será a costa de los madrileños".