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La Comunidad y EE UU inician una negociación de urgencia para desbloquear la Ronda Uruguay

Lluís Bassets

La Comunidad Europea y Estados Unidos están intentando de nuevo desbloquear la Ronda Uruguay del GATT (Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio) en una serie de reuniones maratonianas que empezaron ayer en Bruselas, se prolongarán hoy por la mañana y podrían seguir todavía algún día más durante esta semana. Las subvenciones a la agricultura europea son el principal obstáculo para conseguir la culminación de la Ronda Uruguay, iniciada en 1986 y bloqueada hace casi dos años precisamente en Bruselas. El escollo de la agricultura se ha agravado por las últimas declaraciones francesas.

Los secretarios de Estado de Agricultura y de Comercio estadounidenses, Edward Madigan y Carla Hills, respectivamente, se reunieron ayer durante toda la jornada con los comisarios correspondientes de la Comunidad Europea, Ray McSharry y Frans Andriessen. Las reuniones proseguirán como mínimo durante la mañana de hoy y se sabe que todos los participantes tienen limpias las agendas hasta mañana martes.Los resultados de los encuentros serán debatidos en el Consejo Europeo de Birgminham del viernes próximo, convocado por la, presidencia británica de la Comunidad Europea para intentar insuflar nuevos ánimos a la quebrantada construcción europea.

La reunión que empezó ayer en Bruselas se ha realizado a instancias del presidente de los Estados Unidos, Georges Bush, que necesita como agua de mayo algún triunfo que presenta, a su electorado en las cuatro semanas que le quedan para las elecciones presidenciales. Para los Estados miembros de la CE, un súbito desbloqueo de la Ronda Uruguay podría significar una bocanada de aire fresco en su enrarecida situación, en la que se mezcla la crisis económica, los problemas que está encontrando la ratificación de Maastricht y la fisura abierta en el Sistema Monetario Europeo por la salida de la libra y de la lira.

Francia se ha negado en redondo a aceptar nuevas concesiones en política agraria y ha dejado caer la necesidad de ampliar el campo de negociación para conseguir un acuerdo.

La Comunidad, y dentro de ella Francia, está muy interesada en una liberalización del sector servicios norteamericano. La urgencia de desbloquear el GATT, sobre todo por las malas perspectivas económicas mundiales que se podrían ver aligeradas con un acuerdo, ha creado un clima de casi unanimidad entre los Doce, con la salvedad del gobierno francés, prácticamente aislado en su defensa de la agricultura europea.

[El ministro de Asuntos Exteriores francés, Roland Dumas, declaró anocha a una cadena regional de televisión gala que las negociaciones entre la CE y EE UU "no hacen posible un avance positivo y razonable", según informa la agencia Reuter. En opinión de Dumas, "las negociaciones que muestran claramente que estamos muy lejos de alcanzar el objetivo". Añadió que estaba a favor de un acuerdo pero "no en detrimento de sus intereses vitales". Para el ministro francés "la agricultura europea y en particular la francesa no pueden ser sacrificadas".]

Aislacionismo

El gobierno conservador británico ha visto como empezaba a cambiar su posición de aislamiento estos últimos días, principalmente en el último Consejo de Ministros europeo en Luxemburgo, dedicado en su primera jornada del pasado lunes 5 de octubre a temas políticos y presupuestarios en la jornada del martes a temas comerciales y arancelarios. Mientras que el primer día Gran Bretaña no conseguía romper su soledad en sus pretensiones de cortar las alas de la Comisión Europea, en la segunda fue Francia la que quedó arrinconada en sus posiciones de defensa comercial y arancelaria a propósito del GATT.

Uno de los portavoces norteamericanos afirmó ayer a media tarde que "no hay nuevas ideas sobre agricultura encima de la mesa, al menos por lo que yo conozco". La celebración de los encuentros se ha mantenido en un clima de discreción que ha rozado la clandestinidad, en evidente contraste con la publicidad que rodea la mayor parte de las reuniones de negociación internacional.

Encuentros bilaterales

Los portavoces de los negociadores se limitaron a confirmar ayer a las seis de la tarde que las reuniones habían empezado y que se celebraban en dos encuentros bilaterales, los responsables de Agricultura por un lado y los de Comercio por el otro. Todos se juntaron en la hora del almuerzo. Carla Hills y Frans Andriessen seguían discutiendo ayer por la noche durante la hora de la cena y tenían previsto seguir todavía hoy por la mañana, Nada se informó en cambio de las intenciones de reunión de los responsables de Agricultura.

El comisario europeo McSharry había declarado antes de empezar los encuentros que si no se producía un acuerdo en las próximas dos semanas difícilmente habría culminación de la Ronda Uruguay en los próximos dos años.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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