El episcopado checo condena la primera 'boda' homosexual celebrada en el país
La Iglesia católica condena el primer casamiento de homosexuales en Checoslovaquia, celebrado el pasado jueves en un templo católico de la capital checa, según manifestaron representantes del arzobispado de Praga.Lukas, de 34 años, y VIadimir, de 33, contrajeron matrimonio en la céntrica iglesia de Santa Úrsula en presencia de numerosos familiares y cerca de 40 amigos. La comitiva causó un considerable revuelo entre los transeúntes y un verdadero escándalo entre los fieles que rezaban en ese momento en el templo.
Pese a que de momento las leyes checoslovacas no permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo y que el intercambio de anillos entre Lukas y VIadimir tuvo lugar sin la presencia del cura -"sólo en la casa de Dios", dijo uno de los invitados-, fue una boda como debe ser, incluido un beso- de los felices novios ante el altar y las madres de ambos, que derramaron lágrimas de emoción.
"Violación del recinto sagrado"
Lukas y VIadimir invitaron a todos los testigos del momento "más feliz de su vida" al banquete, ofrecido en el restaurante praguense Valdek, el primer gay club abierto oficialmente en Checoslovaquia."Los participantes en ese casamiento no contaban con ninguna autorización para celebrar la ceremonia en un templo católico y su entrada en la iglesia representa una grosera violación del recinto sagrado", afirmaron las autoridades eclesiásticas.
"La postura de la Iglesia ante los enlaces de homosexuales sigue siendo inalterable desde los tiempos del apóstol Pablo", puntualizaron fuentes de la jerarquía católica checa.
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