El presidente de Casinos no contesta las preguntas de la acusación particular

Arturo Suqué, presidente del Consejo de Administración de Casinos de Cataluña / Inverama, se negó ayer a contestar las preguntas de los letrados que ejercen la acusación en el llamado caso Casinos. Suqué -acusado por un ex directivo de su empresa de haberse apropiado de 3.000 millones de pesetas de la sociedad que preside, un tercio de los cuales habrían ido a parar a dos miembros del aparato financiero de Convergéncia Democrática- dictó su declaración y sólo contestó las preguntas del juez y del fiscal.

El empresario negó todas las imputaciones y acusó al denunciante de ser él quien se apropió de 480 millones de pesetas. Suqué ha prestado declaración casi tres años después de que Jaime Sentís, ex director financiero de su empresa, presentara contra él una querella por apropiación indebida. Su negativa a contestar a los abogados de la acusación -una actitud similar a la adoptada recientemente por dos de los implicados en el caso Filesa- no fue obstáculo para que dijera a los periodistas que estaba muy satisfecho de haber declarado por fin y de haber podido aclarar todos los puntos y demostrar que son falsas las acusaciones contra él.Además del abogado que representa a Sentís, ejercen la acusación popular un letrado que representa a Iniciativa per Catalunya y otro que actúa en nombre de un particular, organizador de timbas ilegales.

El presidente de Casinos justificó su negativa a declarar en que uno de los abogados representa a una persona que le ha "robado 480 millones" de pesetas y le "ha acusado falsamente", en que el letrado de IC "actúa por intereses claramente políticos" y él no hace política, y en que el tercer letrado "representa a un organizador de juego ilegal". Este último abogado, Esteban Gómez Rovira, pidió que constara en acta su protesta, y el abogado de Sentís, Manuel Sáez Parga, hizo notar que el declarante había acusado a su cliente de robo, ante testigos y en dos o tres ocasiones, por lo que se reservaba el derecho a actuar judicialmente.

Suqué aseguró que él desconocía el funcionamiento administrativo y contable de sus sociedades, ya que era Jaime Sentís quien tenía plenos poderes. Negó todas las acusaciones del ex directivo y no reconoció como suya la firma al pie de varios documentos, aunque admitió que se parecían.

De los 1.000 documentos -cheques, facturas, escrituras- aportados por el denunciante, Suqué dijo que unos están falsificados, otros -como las cesiones de crédito y los pagarés del Tesoro- corresponden a operaciones desconocidas por la empresa y que Sentís efectuó en su provecho, y un tercer grupo son facturas y gastos normales.

Mecenas

Como entre la documentación aportada por Sentís figuran facturas de varias empresas periodísticas por inserciones publicitarias que el denunciante dice que nunca se realizaron, Suqué aportó ayer un contrato de mecenazgo con la editora del diario Avui, situado en la órbita de CDC. Los casinos, según el contrato, pagaron a ese diario editado en lengua catalana 770 millones de pesetas entre 1986 y 1990 a cambio de servicios publicitarios, asesorías, reportajes gráficos, encartes, etcétera. Suqué citó también el mecenazgo ejercido por su empresa con el Orfeó Catalá, el Consorcio de Normalización Lingüística y la candidatura olímpica de Barcelona.Al acusado le consta que Francesc Gordo (dirigente de CDC) tuvo varias entrevistas con Sentís, "pero relativas a la publicidad de Casinos" en Cadena 13, pero que él nunca ordenó que se le hiciera pago alguno. A Albert Serra (contable de CDC) ni le conoce ni le consta que haya tenido tratos económicos con Casinos.