El nuevo Código Penal liberaliza el aborto en los tres primeros meses

La decisión del Consejo de Ministros de ampliar la despenalización del aborto durante los tres primeros meses de gestación para aquellas mujeres que certifiquen médicamente que experimentan angustia o ansiedad a causa de su embarazo significa, según los expertos, una liberalización de hecho de la interrupción del embarazo. El Gobierno acordó ayer la remisión a las Cortes del proyecto de Código Penal, en el que se ha suavizado la regulación de los delitos de opinión, pero se mantiene la pena de inhabilitación para los periodistas reincidentes.

La introducción de un cuarto supuesto despenalizador que permite abortar a la mujer que acredite, mediante certificado médico, que el embarazo la ha conducido a una "situación de angustia" fue ayer evaluado por varios expertos como una liberalización de hecho del aborto. El catedrático de Derecho Penal Tomás S. Vives, vocal del Consejo General del Poder Judicial ponente del informe sobre el inicial anteproyecto de Código Penal, declaró ayer que la reforma "abre tantas posibilidades para la mujer que puede llegar a decirse en la práctica que la que quiera abortar, aborta".En esa misma línea, el portavoz adjunto del PNV en el Congreso de los Diputados, Emilio Olabarría, aseguró que en la práctica se abre "la posibilidad de un aborto sin limitaciones durante las 12 primeras semanas de embarazo". El presidente de la Federación Pro Vida, Justo Aznar, más dramático, manifestó que "votar al PSOE es votar muerte". Por su parte, el CDS anunció ayer que pedirá un referéndum sobre la ampliación del aborto.

Frente a estas posiciones, el ministro de Justicia, Tomás de la Quadra-Salcedo, autor de la propuesta asumida por el Gobierno, considera que es perfectamente constitucional. Alega que la cautela del certificado médico y de la consulta previa a los servicios públicos de salud muestra que existe sensibilidad hacia el nasciturus, en la línea de lo exigido por el Tribunal Constitucional, que, sin embargo, avaló la prevalencia de la salud de la madre en el conflicto con la supervivencia del feto.

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