_
_
_
_
_

Cuatro detenidos en Almería por el secuestro de un ejecutivo

Celestino G. T., apoderado de la empresa inversora Kimper, de Castellón de la Plana, logró escapar ayer de una casa de San Juan de los Terreros (Almería), donde permaneció secuestrado durante varios días por dos hombres, que fueron detenidos, según fuentes de la Guardia Civil.La fuga del ejecutivo evitó que un tercer delincuente, también detenido, hiciera efectivo un talón bancario por valor de ocho millones de pesetas que habían obligado a firmar a la víctima. En la operación policial, uno de los secuestradores, Giuseppe Capazzo, nacido en Montreal (Canadá), resultó herido leve como consecuencia de un disparo recibido en la espalda al tratar de hacer frente con una pistola a los agentes. Durante el forcejeo mantenido para evitar ser detenido, dos guardias civiles resultaron heridos de carácter leve.

La investigación sigue abierta y se dirige hacia la comprobación de las circunstancias en que el apoderado fue abordado por los secuestradores.

Tiroteo

En la denuncia presentada por él financiero en el cuartel de la Guardia Civil de Águilas (Murcia), a donde logró llegar a pie tras recorrer unos ocho kilómetros, aseguró que cuando estaba de viaje hacia Alicante fue convencido por la joven María Dolores R. , de 19 años, que le acompañaba, a desplazarse hasta Almería.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Al llegar a San Juan de los Terreros, dos hombres le obligaron a permanecer en una vivienda durante varios días hasta que pudo salir durante la madrugada de ayer. En el tiempo en que estuvo retenido, los secuestradores obligaron a la víctima a firmar un talón y a efectuar una llamada telefónica a un banco para dar su conformidad a que otra persona hiciera efectivo dicho documento.

A primera hora del día, efectivos policiales de las dos provincias se acercaron al pueblo interceptando en pleno campo a Giuseppe Capazzo, que al ser visto sacó una pistola, que no llegó a utilizar al haber sido alcanzado en la espalda por una bala que le produjo solamente heridas de carácter leve.

Más tarde fue detenido su compañero, Juan Enrique Cantaruti, argentino nacionalizado español, que no presentó resistencia. Los dos hombres resultaron ser un italiano con pasaporte canadiense, y un argentino nacionalizado español. El cómplice es el español José Benítez García, que se desplazó a Huercal-Overa, para tratar de hacer efectivo en una entidad bancaria el cheque de ocho millones que la víctima había firmado bajo amenaza. Según ha declarado Benítez, el talón se lo entregó a Juana Garcia, que se ha convertido en la cuarta persona detenida.

Los investigadores mantuvieron ayer un mutismo total sobre los detalles de la operación, para no entorpecer otras detenciones que consideraron inminentes. Los detenidos y el apoderado permanecían ayer en el cuartel de la Guardia Civil de la localidad de Vera.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_