Colectivos de marroquíes advierten que la inmigración ilegal "acaba de empezar"
La inmigración ilegal que llega a España procedente de Marruecos "no ha hecho más que empezar", según advierten diversas asociaciones de ayuda a inmigrantes, que creen que esta invasión se realiza básicamente a través de las pateras controladas por organizaciones mafiosas que actúan en las localidades marroquíes de Tánger, Castillejos y Tetuán. Dichas redes, también usadas por ciudadanos mauritanos, senegaleses y argelinos, cobran por el pasaje entre 70.000 y 200.000 pesetas. La policía y la Guardia Civil han detenido este año a 816 inmigrantes clandestinos entre Tarifa y Algeciras.
Una de las principales organizaciones que se dedican a este tráfico ilegal opera en la plaza de Feddan, en Tetuán, donde se realizan los contactos con los clientes dispuestos a cruzar de noche el Estrecho. El precio mínimo del billete de embarque es de 70.000 pesetas, aunque varía dependiendo del estado de la mar, del viento de levante y de la demanda que haya en cada momento. Otras expediciones se organizan en Castillejos, a pocos kilómetros de Ceuta.Otra red emplea barcos de pesca, generalmente españoles, "que ahora se dedican a pescar hombres porque es un negocio más rentable", según fuentes de la secretaría de Emigración de CC OO. Por este método, trasladan en cada viaje a la costa de Almería a 50 o 60 inmigrantes. Cada uno paga 100.000 pesetas.
"Las antiguas mafias que controlaban la droga se dedican ahora al tráfico de seres humanos", dicen las asociaciones de inmigrantes. Estas organizaciones coinciden en que muchos de los que huyen de Marruecos vienen desinformados, sin saber qué futuro les espera.
La mayoría de los ilegales son trabajadores sin cualificar, pero también hay médicos, estudiantes y funcionarios que huyen del hambre y la mala situación económica de su país, "contando con la consentímiento total de las autoridades marroquíes", según denuncian las organizaciones de inmigrantes.
El Cuerpo Nacional de Policía investiga la existencia de diversas redes que recogen en Cádiz a los grupos de ilegales para trasladarlos a campos de trabajo en Almería, Valencia o Cataluña, donde son sometidos a un régimen de explotación laboral en condiciones infrahumanas.
Las organizaciones que cobran 200.000 pesetas por cada pasaje se comprometen a que el inmigrante consiga su objetivo de llegar a Madrid o Barcelona, que son dos de los destinos más solicitados. En este caso, la red tiene todo preparado: desde el embarque en África hasta su recepción en tierra española, pasando por el billete para ir en tren o autobús hasta la capital madrileña.
Incomprensión
Un dirigente de la Asociación de Emigrantes Marroquíes en España (AEME) se lamenta de que los españoles se sobresalten cada vez que un grupo de ilegales muere ahogado en el Estrecho, mientras que no quieren conocer las causas de esta emigración ni las condiciones de explotación que este colectivo sufre en España.En la zona comprendida entre las localidad gaditanas de Algeciras y Tarifa han sido detenidos este año 106 clandestinos en enero; 156 en febrero; 128 en marzo; 220 en abril; 193 en mayo y 13 en lo que va de mes de junio, según la policía.
