Una cruz del siglo XVII por 41 millones de pesetas

Una cruz de oro y esmeraldas del siglo XVII fue la máxima atracción de la subasta de ayer en Christie's de Londres. La cruz formaba parte de la carga del galeón Nuestra Señora de las Maravillas, que naufragó frente a las costas de las Bahamas con un tesoro de cinco millones de onzas de oro y numerosas piezas de orfebrería.Un equipo encabezado por el capitán Herbert Humphreys localizó los restos del galeón y, en verano de 1989, rescató la cruz, en perfecto estado después de tres siglos enterrada en el fondo marino. Un comprador anónimo, que pujaba por teléfono, se quedó ayer con la cruz por 41,5 millones de pesetas. Es el precio más elevado pagado nunca por una joya del siglo XVII.

En conjunto, las piezas recuperadas del Nuestra Señora de las Maravillas, cruz incluida, fueron adjudicadas por casi 160 millones de pesetas. Fue una subasta "de extraordinario éxito", según un portavoz de la firma subastadora Christie's. Un broche de oro y esmeraldas cambió de propietario por 10 millones. Un joyero de madreperla se vendió por seis millones. La carga del infortunado galeón dio para mucho.

Pistolas

Al margen del naufragio, un par de pistolas fabricadas en 1791 por el maestro armero madrileño Francisco Antonio García, discípulo de Antonio López y armero de los reyes borbónicos Carlos III y Carlos IV, alcanzó un precio de 4,5 millones de pesetas. Un pequeño jarrón de cerámica de Talavera de la Reina (Toledo), datado hacia finales del siglo XVII, alcanzó las 800.000 pesetas.

Un marco de madera, decorado con cabezas de querubines y datado hacia el año 1580, fue adquirido por tres millones de pesetas. Casi todas las grandes pujas fueron efectuadas por teléfono, y los compradores expresaron su deseo de permanecer en el anonimato.