Limpieza del Guadalquivir
Ya sé que no es competencia de la organización de la Exposición Universal de Sevilla tal cometido, como que tampoco es propio de una exposición, feria, muestra, o lo que esto sea, el mantener las aguas de los ríos limpias, pero... algo no funciona en nuestra sociedad. En pocas palabras: muchas tecnologías (microclimas incluidos), vídeos, efectos acústicos y visuales nuevos, historia efectista, arte, naturaleza (hasta semejar la selva) y, sin embargo, el Guadalquivir que sirve de marco al recinto de la Exposición está contaminado, huele, no se ve el fondo, el agua está sucia. ¿Hasta qué punto tanta exposición colma las necesidades de la población, si la naturaleza, el río Guadalquivir, aquello con lo que convivimos casi cotidianamente está deteriorado, y no se ha hecho nada por solucionarlo?
La Expo, supongo, hubiera sido una buena excusa para remozar el río; ¡la Expo se irá y el río seguirá... contaminado!
Algo no funciona en nuestra sociedad: es el caso de que se ha concedido más importancia a cosas tales como el arte, la ciencia o la tecnología que a la propia naturaleza in situ, aun existiendo un pabellón dedicado a ella. Una muestra es para ver, oler, sentir, gozar, y lo que el río Guadalquivir a su paso por el recinto de la Cartuja muestra es algo desagradable a los sentidos; ello empaña la exposición, y los organizadores lo hubieron de haber previsto. No creo que cueste tanto mantener limpios nuestros ríos, pero si es el dinero y no el hombre el eje que guía nuestras vidas... algo no funciona en nuestra sociedad.-
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