Cerrar por el norte la M-40 sería innecesario si se quitaran los semáforos de la M-30

El Ministerio de Obras Públicas y Transportes considera una frivolidad la idea del Ayuntamiento de suprimir los tres únicos semáforos de la M-30, en la avenida de la Ilustración. Los estudios de tráfico efectuados en la zona demuestran que al eliminar estos semáforos se colapsaría la avenida, que duplicaría el tránsito actual de coches hasta más de 100.000 coches, y sobre todo el nudo norte, actualmente ya saturado. Este proyecto, además, pondría en evidencia el ímpetu con que el ministerio afronta la polémica construcción del cierre norte de la M-40 por El Pardo porque rebajaría su tráfico al menos un 11%.

Los responsables del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) no quieren eliminar los tres cruces con semáforo que perduran actualmente en la M30, todos ellos en el primer tramo de la avenida de la Ilustración.José Javier Dombriz, director general de carreteras del ministerio, considera una "ligereza" y una "frivolidad" la propuesta municipal que reclama este proyecto.

Obras Públicas tiene catalogada esa zona del barrio del Pilar como una ciudad donde viven 200.000 personas. "Sería brutal hacer allí otra Castellana", comentan sus técnicos. Dombriz defiende que el peine formado por la avenida de la Ilustración con semáforos, el eje Sinesio Delgado, que mañana se abre al tráfico, la carretera de la Playa (avenida del Cardenal Herrera Oria) y, en el futuro, el trazado norte de la M-40 "resuelve perfectamente el transporte urbano de la zona".

Simulación por ordenador

Para justificar estos argumentos, el ministerio ha recurrido a un estudio de simulación de tráfico por ordenador en el que se contemplan todas las alternativas posibles.Primer escenario: apertura del eje de Sinesio Delgado y de la avenida de la Ilustración tal y como está ahora.

Estos dos ejes cerrarán la circunvalación de la M-30 por el norte, captando tráficos de paso entre las principales carreteras radiales y distritos periféricos. Este itinerario alternativo de penetración a la zona norte beneficiará sobre todo a los barrios de Tetuán (Azca) y Chamartín, descargando la entrada clásica por la carretera de La Coruña hasta Moncloa y Cea Bermúdez. Esta disminución se compensaría con el aumento del tráfico local.

La avenida de la Ilustración se cargará de coches en los próximos meses hasta intensidades de 68.000 vehículos diarios, como las grandes avenidas congestionadas del interior de la ciudad. Cuando se inauguró, hace un mes, ya pasaban por el primer tramo unos 20.000 vehículos y se preveía un uso de unos 50.000.

En los próximos años, esta intensidad se incrementará. La presión o demanda de tráfico, sin embargo, se intentará limitar a un máximo de 80.000 vehículos diarios, precisamente por la existencia de los semáforos y por las escasas posibilidades de ampliación de los enlaces de está vía con la carretera de Colmenar y con el nudo norte.

La apertura del eje de Sinesio Delgado aliviará algo la avenida de la Ilustración, especialmente en la distribución de tráficos del noroeste y Moncloa. Este itinerario se cargará inmediatamente de intensidades próximas a los 50.000 coches por jornada.

Segundo escenario: eliminación de los semáforos de la avenida de la Ilustración.

El tramo más urbano de la vía, y por tanto de la M-30, mejoraría sus medias de velocidad. En el estudio no se entra a valorar los costes de calidad de vida para los vecinos ni los económicos del proyecto, que serían altísimos. El ministerio entiende que el tráfico se situaría por encima de los 100.000 vehículos diarios y que la circulación no mejoraría, ya que los problemas se trasladarían al nudo norte y al enlace de la avenida con la autovía de Colmenar.

La Castellana soporta diariamente, según tramos, entre 70.000 y 113.000 coches. Francisco Silvela, entre 85.000 y 120.000.

Tercer escenario: apertura del cierre de la M-40, lo que no será realidad hasta dentro de tres años como mínimo.

La M-40 captaría entonces la práctica totalidad de los tráficos de paso con origen y destino en el exterior de este cuarto cinturón de Madrid (el segundo en la realidad), así como buena parte de los movimientos de circunvalación interiores.

El tramo de la M-40 que discurre entre la carretera de La Coruña (El Barrial) y la carretera de El Pardo (nudo de la Zarzuela) conectará directamente con la avenida de la Ilustración, por lo que servirá de acceso alternativo al eje de Sinesio Delgado y cargará de coches la avenida.

La intensidad de tráfico que se prevé para 1995 en el cierre norte de la M-40, entre la N-VI y la autovía de Colmenar, varía entre 92.000 y 103.000 coches. Los efectos positivos se apreciarán en la avenida de la Ilustración, que reduciría su tráfico un 10% (hasta unos 72.000 vehículos diarios), y en el eje de Sinesio Delgado, que trasvasaría un 27% de sus coches a la avenida de la Ilustración.

Cuarto escenario: apertura del cierre norte de la M-40 y transformación de la avenida de la Ilustración en autovía al suprimir los semáforos. Año 1995.

Obras Públicas admite que con la M-40 cerrada podría pensarse en optimizar, desde el punto de vista del tráfico, la avenida de la Ilustración al suprimir los semáforos del tramo urbano. El ministerio ha extraído una conclusión que no le ha gustado nada: la avenida de la Ilustración pasaría a duplicar el número de coches que la transitan hasta unos 97.000 en detrimento de la M-40. Es decir, el tramo por el monte de El Pardo de esta vía tan polémica, tan deseada y odiada dejaría de tener sentido.

El ministerio calcula que el distribuidor norte de la M-40 perdería, con esta hipótesis, un 11% de su tráfico, que se marcharía principalmente a la avenida de la Ilustración.