Cierre masivo de comercios y oficinas en Nueva York
Tan sólo tres heridos en dos incidentes raciales y 15 detenciones entre los asistentes a dos pequeñas manifestaciones en Bronx y Brooklyn para protestar por el veredicto en el caso King, bastaron para sembrar el pánico, entre los blancos de la ciudad de Nueva York. Comercios y oficinas empezaron a cerrar de forma masiva.Nada, o casi nada, había pasado. Una pareja de blancos ha bía sido agredida en una tienda de comestibles de Manhattan por un grupo de negros, y un joven blanco había sido golpeado, también por negros, en el metro de la calle 42. Estos incidentes, bastante habituales en una ciudad tan violenta como Nueva York, hicieron que los comercios cerraran y la gente se apresurara a regresar a sus casas. Era difícil encontrar taxis libres.
Poco después, un centro comercial de New Rochelle, en un suburbio del norte de la ciudad, fue saqueado por una banda y antes de que la situación fuera a mayores, el alcalde de Nueva York, David Dinkins, se apresuró a pedir calma a la población.
A pesar de las peticiones de tranquilidad, los neoyorquinos seguían temiendo a que estas pequeñas muestras tuvieran el mismo efecto multiplicador que en Los Ángeles provocó una ola de terror.
Los negocios cerraron sus puertas y las empresas de Wall Street, el corazón financiero de los Estados Unidos, enviaron a sus traba adores a casa a las tres de la tarde después de haber su frido una caída de 23 puntos. "Ha sido muy curioso, manadas de gente blanca muertas de miedo bloqueando las salidas para regresar lo antes posible a sus hogares y mirando con sospecha a cualquier negro con el que, se cruzaran", declaró a este periódico un ejecutivo de la firma Kidder Peabody. La Universidad de Nueva York, la mayor es cuela privada del país, se apresuró a cerrar su campus, lo mismo que la ONU.
Varios centenares de personas comenzaron a agruparse en Times Square a primeras horas de la noche, en una. manifestación que, según los responsables municipales, iba a ser pacífica.
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