_
_
_
_

"¿Hay alguien aquí?"

"¿Hay alguien aquí?". Lanzando este grito entre las casas derruidas, los vecinos de las calles de los alrededores de la antigua Central Camionera no esperaron al auxilio de los cuerpos de rescate y unos minutos después del estallido que levantó por completo el arroyo de las arterias viales y derrumbó cientos de viviendas se organizaron para buscar entre los escombros a amigos y parientes."Aquí, aquí era la tienda de Ramoncito, aquí debe estar enterrado". Varios refrescos, jabones y veladores dan fe de que había una tienda, pero ahora hay sólo dos metros de escombros. La visión de las calles derruidas, de los vehículos atrapados por escombros, de los cientos de fachadas que desaparecieron es lo más parecido a una zona arrasada por un bombardeo.

Más información
Al menos 150 muertos tras 12 explosiones de gas en la ciudad mexicana de Guadalajara

Don Francisco está todo lleno de tierra, tiene los ojos muy abiertos y los brazos cubiertos de sangre. "A mí me acaban de sacar, por suerte que estaba el huequito que dejó el saltamontes (un Volkswagen verde que era de su propiedad y que está completamente enterrado bajo los escombros). Por ahí me entraba aire y me sacaron luego".

"A mí la explosión me agarró aquí afuerita de mi taller, yo no vi nada, nomás sentí al cabronazo". Un vecino interviene: "Ay, don Panchito, pues a usted Dios lo quiere mucho". Don Francisco respira hondo, se unta limón en las heridas de sus brazos y asiente.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_