Los sindicatos dan un ultimátum al Gobierno para que retire el decreto
Los líderes de UGT y CC OO, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez, dieron ayer "una última oportunidad" al Gobierno para que retire el decreto que recorta el subsidio de paro y evite una larga tensión social. Si no se atiende esa exigencia, los sindicatos irán a un proceso prolongado y contundente de protestas cuyas fechas precisarán unitariamente los dos sindicatos "cuando lo crean oportuno". Con ese único punto en el orden del día, UGT ha convocado para el 24 de abril una reunión extraordinaria de su comité confederal, máximo órgano de decisión. La ejecutiva de CC OO ya tiene el mandato de su consejo confederal.
Ni UGT ni CC OO hablan abiertamente de una huelga general y es previsible que no lo hagan hasta que no le pongan la fecha concreta, tal y como ocurrió en el paro del 14 de diciembre de 1988. Pese a ello la decisión está tomada.El supremo órgano de decisión de Comisiones ha aprobado por unanimidad el convocar, de acuerdo con UGT, las movilizaciones que sean necesarias hasta conseguir la retirada del decreto de medidas laborales y -la apertura de negociaciones.
La ejecutiva de UGT está pendiente de la reunión de su comité prevista para el 24 de abril, pero ayer su secretario general, Nicolás Redondo, avanzaba ya que "habrá un proceso largo y contundente de protestas" y han desistido de realizar "todo el esfuerzo en un día o unas horas". En una resolución aprobada ayer por la ejecutiva ugetista se dice que el Ejecutivo "parece que quisiera una rápida confrontación" y añade que "no vamos a jugar al son que le interesa al Gobierno". El sindicato ha optado por definir la estrategia que, en tiempo, forma e intensidad, considere más eficaz y "sin renunciar a ninguna forma de presión".
Paro de 24 horas
El consejo confederal de CC OO ha dejado "manos libres" a su ejecutiva para que "gobierne el proceso de protestas" en unidad con UGT. En los debates mantenidos el lunes y martes, la práctica totalidad de los dirigentes que intervinieron propusieron una escalada de protestas que se prolongue el tiempo necesario y un paro general de 24 horasAntonio Gutiérrez declaraba al término del consejo que el rechazo de su sindicato es unánime a las medidas aprobadas en el pasado Consejo de Ministros. Ese rechazo se refiere al fondo y a la forma. "Creíamos que era un precedente irrepetible el decreto Abril Martorell sobre topes salariales, que afectaba a trabajadores que se podían defender. Este decreto es peor, porque ataca a los parados y a los eventuales", afirmaba ayer el dirigente sindical.
A Nicolás Redondo le parece la medida del Gobierno "un verdadero disparate" y argumenta que el plan de convergencia consiste en objetivos macroeconómicos que se pueden cumplir o no y la única medida efectiva es el decreto de recorte del subsidio. El líder de UGT afirma que esa decisión supone "el principio del fin de un ciclo que se inició en 1982 con la llegada al poder del partido socialista y que termina con fracaso, frustración y malestar social". En otro momento mostró su preocupación porque "una parte importante de la izquierda se ha quedado sin referencia".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.