_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Giro olímpico

EL GOBIERNO catalán desea dar mayor presencia a "la simbología catalana, sobre todo de la bandera", en los Juegos Olímpicos de Barcelona. El secretario general de Deportes de la Generalitat, Josep Lluís Vilaseca, celebra reuniones con presidentes de federaciones deportivas catalanas. Invita a ellas al presidente del Comité Olímpico Catalán (COC) -un organismo no oficial que pretende separar el olimpismo catalán del español-, un ex consejero de Jordi Pujol. Diversos asistentes han testimoniado que el objetivo de los encuentros era conseguir que cinco federaciones soliciten la segregación de sus correspondientes españolas y el reconocimiento internacional imprescindible para que se forme un comité olímpico catalán independiente del español.La cuestión de los símbolos, banderas y protocolo en las ceremonias olímpicas había sido objeto de un consenso ya cerrado entre todos los socios de la organización de los Juegos Olímpicos (JJ OO), el Gobierno de Pujol entre otros, de forma que los deseos expresados por el presidente catalán tras sus excelentes resultados electorales han suscitado la protesta de las otras instituciones ante lo que entienden que es una ruptura del "pacto olímpico".

Sobre el COC, Pujol nunca se había mostrado taxativamente contrario a tal iniciativa, pero sí reticente respecto a su oportunidad, y, en cualquier caso, la había pospuesto a una fecha posterior a los JJ OO: "Apoyar al COC supondría muchas contrapartidas negativas de malestar con el resto de España", llegó a declarar en septiembre de 1989. Ahora, también en esto hay un viraje: el secretario general de Deportes de la Generalitat ha instado a las federaciones a independizarse, dándoles incluso garantías financieras en caso de que la decisión segregacionisita conlleve problemas de este tenor. Está claro que la iniciativa no está pensada para contar con un equipo olímpico catalán antes de los JJ OO, pero la máquina se pone en marcha precisamente ahora, antes de los Juegos y cuando está de nuevo en discusión la presencia catalana en ellos.

Éstos son los hechos. Implican un giro en la política olímpica del Gobierno de la Generalitat, o al menos de su máxima autoridad deportiva. Su objetivo es cambiar el acuerdo de los Juegos e imprimir un ritmo temporal mucho más intenso a la creación del comité olímpico segregado. Ni que decir tiene que, al modificar el clima de consenso, este giro de ninguna manera favorece el éxito de los JJ OO ni del olimpismo catalán o español. ¿Qué ganarían los deportistas catalanes con la separación, aparte de "contrapartidas negativas de malestar"? Esta inflexión en la política olímpica del Gobierno catalán parece más bien destinada a neutralizar las iniciativas de la ascendente -e independentista- Esquerra Republicana de Catalunya, de Angel Colom. También resulta sintomático que el presidente del Comité Olímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch, haya sido -con sus declaraciones, en las que afloró un súbito ataque de pasión catalanista- la pieza central en el giro.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Y tras los hechos, la marcha atrás -coincidiendo con la audiencia del Rey al político nacionalista- y las desmentidas a medias: se reafirma la reivindicación de mayores "cotas de catalanidad" en el protocolo y la simbología de los JJ OO, pero se niega que ello implique un giro y una ruptura del consenso alcanzado sobre este asunto. Se confirman las estrambóticas reuniones de federaciones, Gobierno autónomo y COC, pero se atribuyen a un "invento" de este periódico las garantías económicas que, según distintos asistentes a las reuniones, ofreció la Generalitat a los segregacionistas. El presidente de la Generalitat ha reclamado su derecho a que se le crea cuando afirma que nada ha cambiado en su política olímpica. Si nada ha cambiado, debe recomponer urgentemente el consenso alcanzado en el "pacto olímpico" y desautorizar las reuniones oficiales de impulso a la segregación del olimpismo catalán respecto al conjunto español.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_