Obras Públicas espera el acuerdo y los ecologistas lo critican

El cerebro gris del Ministerio de Obras Públicas y Transportes, José Alberto Zaragoza, secretario general de planificación y concertación territorial, espera el acuerdo entre el PSOE, IU y el Ayuntamiento de Madrid, gobernado por el PP, para actuar. Zaragoza se manifestó ayer satisfecho porque, al menos, nadie cuestiona que el cierre norte de la M-40 debe ejecutarse cuanto antes. El ministerio Insiste en que el problema que ha retrasado esta obra varios años no es la falta de dinero.Este proyecto, que en principio estaba presupuestado en unos 25.000 millones, puede costar ahora, pasando en superficie sobre el monte o bajo tierra en pequeños túneles, alrededor de 17.000 millones de pesetas.

"Nos preocupan la seguridad del trazado y su repercusión ecológica. Por estos dos motivos, fundamentalmente, se ha abierto el debate", coinciden en señalar tanto Zaragoza como José Javier Dombriz, director general de carreteras del Ministerio.El trazado pactado entre el PSOE e IU tiene que llegar ahora al ministerio, que tenía proyectado otro recorrido "más duro ecológicamente". Zaragoza aclaró ayer que no será dificil "acercar líneas" para llegar a una solución final en un plazo breve de tiempo. Cuando esto suceda y la obra sea aprobada en Consejo de Ministros, las máquinas podrán ponerse a trabajar y acabar la carretera, que enlazaría la autovía de Colmenar con la carretera de El Pardo, en unos 24 meses.Aspectos negativos

No todo son aspectos positivos. El Ayuntamiento de Madrid, según la solución de la Comunidad, debe hacerse cargo de la expropiación de tres chalés que están pegados casi a la tapia del monte en la zona de Valdemarín. Estas expropiaciones suponen una inversión de casi 3.000 millones y un contratiempo para las arcas municipales.

Los ecologistas y algunos simpatizantes y militantes de base de IU, son más tajantes. Aedenat se apresuró ayer a distanciarse de este partido, hasta ahora bastante afi1n. "Aedenat da la espalda a la postura oficial de IU sobre el trazado de la M-40 y reactiva la campaña contra este proyecto".

Aedenat aprovecha para recordar sus posiciones a favor de frenar el modelo especulativo y de crecimiento territorial que implica esta obra, para reclamar el fomento y la mejora de los transportes públicos y para pronunciarse por medios de transporte no motorizados, como la bicicleta. Además anuncia que constituirá un frente social la semana que viene contra este proyecto con otras entidades ecologistas, vecinos de los barrios y distritos afectados y la propia Federación Regional de Asociaciones de Vecinos.