El conductor que mató a dos policías en la M-30 dice que no recuerda nada

Francisco Espi Luna, el conductor toxicómano de 24 años que embistió en la ronda de circunvalación M-30 con una furgoneta robada a un vehículo radar de. la policía local cuyos dos agentes resultaron muertos por aplastamiento, ha asegurado al juez que no recuerda nada de lo sucedido. "Sólo recuerdo que me desperté en el hospital [en el Clínico, donde fue atendido de sus heridas], y allí me contaron lo sucedido", asegura en su declaración.Espi Luna se encuentra desde entonces internado en la prisión de Carabanchel, acusado de la muerte de ambos agentes, entre otros delitos, la mayoría por robo de coches. Un juez lo había puesto en libertad provisional justo un día antes del accidente.

El juzgado ha terminado ya de incoar las diligencias, en las que se imputa a Espi Luna la muerte de los policías Gerardo Terrón Moral, de 36 años, y Ricardo Ríos Rivera, de 40, ocurridas el pasado 19 de noviembre, y las ha remitido al fiscal para que, en su caso, formule la correspondiente acusación o solicite más pruebas.

Los padres del conductor homicida aseguraron tras conocer el suceso -en el hospital Clínico, donde fue asistido de sus heridas Espi Luna- que su hijo era adicto a la droga desde hacía ocho años y que para conseguirla cometía robos y sustraía vehículos con bastante frecuencia.

El accidente se produjo sobre las seis de la mañana, cuando la furgoneta robada que conducía Espi Luna se salió de la M-30 y arrastró por espacio de 30 metros a un vehículo de la policía aparcado en el arcén que efectuaba controles de velocidad.

Los agentes murieron aplastados en el interior del coche patrulla, el cual quedó aprisionado entre la furgoneta robada y una farola.

Espi Luna, que sufrió una fractura maxilofacial, se dio a la fuga a pie y fue detenido en la calle de la Princesa en otro vehículo también robado.