CiU y PSC impiden que el 'caso Casinos' llegue al Parlamento catalán antes de las elecciones

Los diputados de Convergéncia i Unió (CiU) rechazaron ayer, en la Mesa de la Diputación Permanente del Parlamento catalán, una petición de convocatoria extraordinaria del pleno de la misma para debatir propuestas sobre el caso Casinos, un asunto de presunta desviación irregular de dinero hacia Convergéncia sobre el que anteayer se presentó nueva documentación acusatoria en el juzgado.

En la Mesa de la Diputación Permanente sólo están representados el grupo de CIU, con tres diputados, y el Socialista, con uno. Los diputados de CiU votaron en contra de la propuesta, que había sido presentada por los grupos de Iniciativa per Catalunya (IC), PP y Mixto. El diputado socialista se abstuvo.El criterio de CiU es que el caso Casinos se debata en la Cámara una vez se hayan celebrado las elecciones autonómicas del 15 de marzo. El PSC cree que una convocatoria del plenario de la Diputación Permanente cuando el Parlamento está disuelto sólo se Justificaría ante una situación de alarma social aguda. Sin negar la gravedad política del caso Casinos, los socialistas estiman que esa situación no es la actual.

Los demás partidos opinan que CiU y los socialistas se protegen mutuamente en los casos Casinos y Filesa, basados ambos en acusaciones de financiación ¡legal de sus respectivos partidos.

Los grupos parlamentarios que habían formulado la propuesta querían que el Parlamento catalán instara al Gobierno de la Generalitat a suspender las concesiones sobre el juego en Cataluña otorgadas a Casinos.

Casinos replica a Sentís

Sentís presentó al juez un millar de documentos que incrementa hasta 3.000 millones el volumen de los fondos desviados y a 800 los que habrían ido a parar a personas vinculadas al aparato financiero de Convérgencia.

Casinos salió ayer al paso de las declaraciones judiciales de Sentís, argumentando que éste, a través de "afirmaciones a veces falsas y otras simplemente gratuitas", trata de crear confusión para escapar de sus responsabilidades en el desvío de 500 millones a su propio bolsillo.

Según esta empresa, Sentís presentó al juez facturas de proveedores habituales, debidamente contabilizadas: fotocopias manipuladas de cheques y talones, en los cuales las firmas no se corresponden con los originales, en los cuales consta únicamente, y en original, la firma de Jaime Sentís", y fotocopias de documentación de la compañía irrelevante en el procedimiento.

El presidente de la Generalitat y de CDC, Jordi Pujol, equiparó ayer a los políticos corruptos con los que se dedican a difamar a otros y utilizan la corrupción como arma política para calumniar a sus rivales. "SI tienen documentos que los presenten", dijo Pujol en relación al caso Casinos, y agregó: "Si hay un político que ha sido mirado por delante y por detrás ese soy yo", en referencia a la querella de Banca Catalana.

Pujol dijo que no se siente agresivo sobre estos asuntos y opinó que la corrupción hay que denunciarla, "pero no debe ser utilizada por los partidos políticos. A ver si vamos aprendiendo. Es una inmoralidad calumniar, agitar y luego, cuando ha pasado la campaña, olvidarse". "Entre nosotros [los políticós] no debemos tiramos barro encima porque somos los primeros perjudicados", agregó.