Las empresas denunciadas por el alcalde dicen que es una venganza

Representantes de las empresas Ulibarri S.A., y Piqsa, dedicadas a la regeneración de aceites usados y que han sido denunciadas por el alcalde de Arganda por presunto delito ecológico, aseguraron ayer que a éste le ha movido la "venganza" y no la preocupación por el medio ambiente."El Ayuntamiento hizo caso de informaciones del comité de empresa y otros trabajadores, sin ni siquiera preocuparse en analizar los aceites", dicen representantes de las empresas. La denuncia, según informaron en el Ayuntamiento (véase EL PAÍS del pasado 3 de febrero), se basa en los resultados de dos análisis del aceite en cuestión realizados en un laboratorio público y otro privado. Éstos contenían, supuestamente, cantidades de PCB's (policloruros de bifenilos, un producto tóxico y peligroso) que superaban las permitidas.

"El alcalde ha manipulado el tema", asegura Pedro Gallego, del comité técnico de Ulibarri S.A. "Se limitó a escuchar a una parte y precintar el aceite sin analizarlo. Sólo ahora, casi diez meses después, lo ha hecho, y ha denunciado a la empresa".

Los representantes de las firmas Ulibarri S.A. y Piqsa dicen, en un escrito enviado a la Redacción de este periódico, que "los aceites contaminados no se han comercializado", y que la utilización de la información por parte del Ayuntamiento es un "montaje" y comporta un desprestigio para unas firmas cuya actividad es "bien social", ya que recicla un producto que, de lo contrario, se vertiría en ríos o se quemaria en cementeras provocando problemas en la atmósfera.

Despidos

En dicho escrito, firmado por Juan Manuel Gascón, delegado de personal de Piqsa, y Pedro Gallego, se afirma que la denuncia puesta por el alcalde, Julio Gómez, de IU, ha sido formulada "en venganza" por los dos despidos que se han producido últimamente y cuyos motivos no han sido los de dar a conocer "información reservada".Según el escrito, las causas del despido de José Antonio Sardinero han sido "apropiación indebida de documentos, insultos contra compañeros, amenazas a directivos, etcétera". "Fue él quien comenzó todo el tema de PCB's". El segundo despedido, un hermano del anterior, fue expulsado, según ambos representantes, "por agresión contra un companero de trabajo, de edad avanzada y operado de cáncer".

Gascón y Gallego aseguran, además, que "los trabajadores de Piqsa revocaron de forma mayoritaria en diciembre pasado a dos de los tres delegados que los representaban, y los trabajadores de Ulibarri también desean revocar a los tres miembros de su comité de empresa". "Es indignante", dicen, "que el alcalde de Arganda del Rey, su grupo político, IU, y el sindicato CC OO apoyen a este minoritario grupo de trabajadores".