Las obras con las que Tápies obtuvo renombre mundial se verán en su fundación de Barcelona

La Fundación Antoni Tápies de Barcelona muestra a partir del próximo jueves, día 23, la exposición Comunicación sobre el muro, una antología de pinturas matéricas del artista catalán realizadas entre los años 1954 y 1967. Los 83 cuadros que integran esta exhibición se hallan entre las obras con las que Tápies irrumpió novedosamente en el panorama internacional del arte contemporáneo y obtuvo reconocimiento mundial. Se trata de obras nunca exhibidas en España, muchas de las cuales se hallan en colecciones privadas o museos extranjeros que, como el MOMA neoyorquino, no suelen cederlas, por lo que la exposición es virtualmente irrepetible. Tras su exhibición en Barcelona, hasta el 29 de marzo, Comunicación sobre el muro podrá verse del 14 de abril al 7 de junio en el IVAM de Valencia, que la ha coproducido, y, más tarde, en la Serpentine Gallery de Londres.

El título de la exposición Comunicación sobre el muro está tomado del de un texto de Tápies escrito en 1969 y posteriormente publicado en su libro La práctica del arte. Manuel J. Borja-Villel, director de exposiciones de la Fundación Tápies de Barcelona, que ha coordinado el proyecto de esta exhibición, comenzó en 1986 a trabajar en la selección, documentación y negociaciones para la cesión de obras. La importancia de las piezas y los costes de traslado y seguros han hecho que, en algunos casos, esas negociaciones fuesen difíciles.La mayor parte de los 83 cuadros que se expondrán no han sido vistos en España, pues desde mediados de los cincuenta hasta finales de los sesenta, las galerías que representaban al pintor catalán se hallaban en París y Nueva York, por lo que estas obras salieron del estudio de Tápies y se han quedado en el extranjero.

Reflexión sobre la materia

La exposición permitirá ver por vez primera en directo cuadros cruciales en la obra tapiana como Relieve gris nº VIII (de 1957 y hoy perteneciente a un coleccionista particular de París), uno de los primeros en los que Tápies acomete lo que él considera "una reflexión sobre la formación de la materia, su unidad originaria y su continua transformación", o como Relieve gris perforado con signo negro (de 1955 y hoy integrada en la colección del Museum of Contemporary Arts de Los Ángeles) que el pintor considera el momento en que descubrió "el lenguaje de la materia gris, monocroma, y el amplio campo de posibilidades que ofrecía la idea del muro, así como los lenguajes de signos, incisiones y contrastes, o la carga especial de colores y materias".A juicio del director de la Fundación Tápies de Barcelona, Miquel Tápies Barba, y de Manuel Borja-Villel, responsable de la exposición, ésta "entra de lleno en la lógica programática de la fundación, porque estudia por vez primera y de manera exhaustiva la producción de Tápies en los cincuenta y sesenta, y en concreto las pinturas llamadas matéricas que lo dieron a conocer en todo el mundo. Así, la fundación da un paso adelante en la consecución de uno de sus objetivos: la revisión de aspectos de la obra de Tápies". Los cuadros que pueden contemplarse en Comunicación sobre el muro proceden de colecciones y museos muy diversos. Dos de ellos son del Museum of Modem Art (MOMA) de Nueva York; otros del MOCA de Los Ángeles; algunos más del Hirschhorn Museum de Washington y de la colección de un antiguo galerista de Tápies, David Anderson, de Buffalo (EE UU). Las obras de colecciones y museos europeos vienen de lugares como el Boymans Van Beuningen Museum de Rotterdam y el Stedelijk Museum de Amsterdam (Holanda), de-colecciones particulares y museos alemanes como el de Stuttgart, o suizos, como la Kunsthaus de Zúrich, así como de colecciones particulares de Francia y Suiza. Entre las instituciones españolas que han prestado obras están el Museo de Arte Moderno de Barcelona, el Centro de Arte Reina Sofía (CARS) de Madrid, el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), que ha coproducido la exhibición, y la propia Fundación Antoni Tápies de Barcelona. Como complemento a la exhibición, se ha editado un catálogo con ilustraciones en color de las 83 obras y textos de Borja-Villel y del historiador francés Serge Guilbaut.