El vicepresidente augura una recta final de la Expo con "sufrimientos"

"Vamos a sufrir hasta el último momento..., aunque estoy convencido de que la Expo 92 va a ser un éxito". Éstas fueron las primeras declaraciones del vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, tras visitar ayer las obras del recinto de la Exposición Universal en Sevilla y mantener una reuril ón con más de quinientos representantes políticos de la provincia de Granada, a los que comunicó el apoyo del Gobierno a la organización del Mundial de Esquí de Sierra Nevada de 1995. En su tercera visita a isla de La Cartuja desde que fue nombrado vicepresidente, Serra inspeccionó los pabellones temáticos, responsabilidad de los organizadores.Serra reconoció que en la recta final de los preparativos de la muestra hasta su inauguración el próximo 20 de abril van a plantearse "muchos problemas", aunque se mostró "absolutamente convencido" de que se van a resolver. En su segunda jornada de visita a Sevilla, Serra inspeccionó los pabellones que construye la Sociedad Estatal, la avenida de Europa y el monasterio de Santa María de las Cuevas, sede del pabellón real.

El vicepresidente del Gobierno afirmó que con la Exposición Universal los españoles demostrarán al mundo que saben "trabajar juntos, cooperar y dialogar" y apostilló que no sólo se verá este esfuerzo en Sevilla sino también en Granada en 1995, fecha en la que está prevista la celebración del Mundial de Esquí de Sierra Nevada.

La mención a este proyecto provocó el aplauso de la amplísima delegación granadina que ayer acudió al recinto de La Cartuja. "El Gobierno trabajará exactamente igual porque en el 95 volveremos a demostrar que resolvemos los problemas y lo hacemos desde la cooperación", apuntó Serra.

El presidente de la Junta, Manuel Chaves, pidió a los representantes de Granada que se sintieran "corresponsables" de la Expo.