Un modelo en ruinas
Los distintos incendios ocasionados por los reclusos amotinados el pasado jueves en la cárcel Modelo de Valencia no han hecho sino acelerar un proceso de deterioro que había condenado a la instalación penitenciaria a un cierre forzoso. Con una capacidad prevista para 500 Presos repartidos en cuatro galerías, la Modelo de Valencia acoge actualmente a cerca de 1.000 reclusos, que en algunos casos viven hacinados en celdas individuales ocupadas, en ocasiones, por hasta cuatro personas.La insuficiencia de plazas peninteciarias en la provincia de Valencia y la degradación de la mayoría de las instituciones penitenciarias existentes, a excepción de la nueva cárcel de Picassent, hacen prever que el nivel de saturación no disminuirá en los próximos años.
La ubicación de la Modelo en pleno casco urbano de Valencia junto a una de las principales vías de entrada
Y salida de la ciudad, convirtieron el motín en un espectáculo ciudadano visible desde los edificios de viviendas colindantes. Es, quizás, uno de los últimos episodios de la Modelo de Valencia, que se prevé clausurar este año.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.