Rectificación de Roberto Dorado

En el suplemento Domingo insertado en el número correspondiente al pasado día 10 de noviembre del periódico que usted dirige, en su página 3, primera columna, párrafo quinto, dentro del artículo titulado Dar guerra, firmado por Luis R. Aizpeolea, se cita y se presenta mi actividad -que no puede ser sino como director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno- de forma tergiversada, por lo que, acogiéndome al derecho de rectificación, quiero manifestar lo siguiente:En el artículo titulado Dar guerra, publicado el domingo día 10 de noviembre, se ofreció a través de mi persona una visión equívoca del trabajo del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, que demuestra el desconocimiento de cómo trabaja este órgano de la Presidencia del Gobierno, lo que se compadece poco con la pretendida calidad de su publicación.

El Gabinete de la Presidencia del Gobierno, configurado como "órgano de asistencia política y técnica del presidente y del vicepresidente del Gobierno", tiene encomendada por sus disposiciones reguladoras (Real Decreto Ley 22/1982, de 7 de diciembre, y Real Decreto 3.773/1982, de 22 de diciembre), entre otras, la función de "conocer las actividades y planes de actuación de los distintos departamentos ministeriales, al objeto de facilitar la coordinación de la acción gubernamental por parte de la Presidencia del Gobierno".

Cabe añadir que tanto el nombramiento del director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno como el de los directores de los diferentes departamentos de este órgano lo efectúa el propio presidente del Gobierno.

Cumpliendo las disposiciones normativas que regulan su actividad, todo el personal del Gabinete de la Presidencia del Gobierno ha realizado sus funciones con la máxima discreción y el mínimo protagonismo desde hace casi nueve años; ha remitido y remite constante mente informes de los más variados temas al presidente del Gobierno a la vez que al vicepresidente. De acuerdo con estos datos, las imputaciones de puenteo y de casi espionaje interno que se hacen a este órgano de la presidencia en el citado artículo son infundadas y carentes de todo rigor, ya que la información transmitida simultáneamente al presidente y al vicepresidente del Gobierno sobre cualquier actividad política general o departamental está dentro de las funciones del Gabinete. Así ha sido en el periodo en el que el vicepresidente del Gobierno era don Alfonso Guerra, como ahora en el que el vicepresidente del Gobierno es don Narcís Serra.

Así pues, la acusación de deslealtad institucional, que implícitamente se quiere transmitir con palabras como "puenteo" y "Gobiernos paralelos", carece de todo fundamento y sólo siembra dudas sobre la dignidad y rectitud en el quehacer político de este Gabinete.- Director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno.