Quadra-Salcedo anuncia "juicios rápidos" para el verano de 1992

El ministro de Justicia, Tomás de la Quadra-Salcedo, propondrá en breve al Consejo General del Poder Judicial la reforma procesal urgente que permitirá la celebración en España de lo que denominó ayer "juicios rápidos" para antes de las Olimpiadas, previstas para julio de 1992. El anteproyecto de ley de medidas-procesales urgentes será presentado el lunes próximo en Madrid.

Según dijo Quadra-Salcedo en París, esa reforma procesal pretende aliviar "la congestión de los juzgados españoles", al posibilitar que, en los casos de flagrante delito, los juicios se celebren en cuestión de días. Según otra iniciativa en marcha, algunas competencias en materia de subastas pasarán de los jueces a los notarios.La reforma procesal entrará en vigor "antes de los próximos Juegos Olímpicos" en los juzgados de Madrid, Barcelona y Valencia, anunció el ministro. Quadra-Salcedo no quiso entrar en detalles sobre el contenido de la reforma, pero especificó que en determinados casos la fecha de los juicios podrá ser fijada desde los propios juzgados de guardia.

Nuevo Código Penal

"El Ministerio de Justicia da también los últimos retoques a una ambiciosa reforma del Código Penal", informó Quadra-Salcedo (veáse EL PAÍS de ayer). El ministro confirmó que se introducirá en el código un concepto de eutanasia "a la altura de los tiempos" y que se suprimirán las referencias al "honor de la mujer" en el delito de infanticidio.

De la Quadra-Salcedo y 80 ministros de otros tantos países participan en París en una conferencia sobre lucha contra la delincuencia internacional, organizada por la ONU. Quadra-Salcedo definió así el espíritu de la comisión que nacerá hoy en Versalles: "Se trata de que las fronteras que ya no detienen a los delincuentes, tampoco pongan obstáculos a la acción de policías y jueces". Preguntado por la actitud francesa sobre la extradición de los etarras, Quadra-Salcedo dijo: "Yo no percibo ninguna animadversión en la actitud francesa; en todo caso, percibo la lentitud que caracteriza a los aparatos judiciales".