Los sindicatos de la Administración se comprometen por vez primera en un plan de productividad

El Gobierno y los sindicatos CCOO, UGT y la Confederación Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) han acordado por vez primera la puesta en marcha de un plan de modernización de la Administración cuyas líneas básicas suponen introducir sistemas de evaluación del rendimiento personal, la aceptación de reestructuraciones y movilidad del personal, el dimensionamiento de plantillas, la adecuación de los horarios a las necesidades públicas y la selectividad de la oferta de empleo público. El acuerdo no contempla la autorregulación de la huelga, que sigue pendiente de negociación.

El acuerdo tiene tres años de vigencia y su aplicación se generaliza a todo el funcionariado, incluido el de los organismos autónomos y de la seguridad social. La implantación del plan se realizará de manera gradual. Cada ministerio establecerá su propio plan y dos comisiones intergubernamentales los coordinarán. Una la presidirá el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, y la otra, de seguimiento, el ministro para las Administraciones Públicas, Juan Manuel Eguiagaray.Según señala el preámbulo del texto del acuerdo, Gobierno y sindicatos se comprometen a mejorar la calidad de los servicios públicos de la Administración y a implantar indicadores de gestión en sus diversos departamentos y organismos "a fin de satisfacer de manera ágil, eficaz y eficiente las demandas de la sociedad".

Respecto a las medidas de acercamiento de la Administración al ciudadano, el acuerdo se concreta en la información personalizada al ciudadano, la creación de centros de información integrada, la adaptación de horarios de las oficinas públicas de relación directa con los ciudadanos a las necesidades de éstos, la creación de servicios de atención al ciudadano y la facilidad de acceso al servicio público, evitando desplazamientos innecesarios de los ciudadanos a las oficinas.

En relación con el horario de la Administración, el texto del acuerdo señala que "la parte principal del horario será de cinco horas y media diarias de obligada concurrencia para todo el personal entre las 9,00 horas y las 14,30". El texto añade: "Se podrán establecer, previa negociación, otras horas de entrada y salida, siempre que se garanticen al menos cinco horas y media continuadas de concurrencia obligada". De la parte variable del horario, constituida por la diferencia entre veintisiete horas y media y las que se establezcan como horario semanal en el calendario laboral, el texto del acuerdo señala que "se podrá cumplir de 7,30 a 9,00 de la mañana y de las 14,30 a las 19,00, de lunes a viernes".

Respecto a la mejora en la eficacia de la Administración, los criterios acordados consisten en la adecuación de las plantillas, la racionalización y mejora de los procesos operativos, la valoración de los puestos de trabajo, y la profesionalización y promoción productivos. Según el acuerdo, la Administración negociará con los sindicatos "Ios aspectos retributivos de las relaciones de puestos de trabajo y los requisitos profesionales para el desempeño de los mismos". "En los ámbitos sectoriales se negocian los criterios indicativos y la fijación de prioridades. En los departamentos se negocia la aplicación de los criterios acordados" añade el informe.

Los sindicatos admiten que un sistema de evaluación de la tarea, que prime el mayor y mejor rendimiento en el puesto de trabajo, es un factor necesario para la profesionalización de la Administración". "Este sistema debe permitir un mayor estímulo para la promoción, fomentando, a su vez, la responsabilidad de los jefes de las unidades correspondientes. En tal sentido, las partes se comprometen a estudiar y diseñar un sistema de estas características" señala el texto del acuerdo.

También aborda la reestructuración de la Administración, con el compromiso de informar a los sindicatos de los cambios del régimen jurídico".