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Un insistente pitido obligó a parar el concierto de Giulini en el Auditorio

Andrés Fernández Rubio

Un insistente pitido obligó el sábado por la noche a detener, al término del Kyrie, el concierto del Requiem de Verdi que ofrecía el director italiano Carlo Maria Giulini, con la Orquesta Philharmonia, en el Auditorio Nacional de Música de Madrid. El origen era ayer todavía desconocido para los responsables del Auditorio. Su directora, Isabel Vázquez, especuló con el sonotone de una espectadora sentada en el segundo anfiteatro, supuestamente acoplado con el sistema de megafonía u otro sistema de comunicación del Auditorio.El pasado viernes, también durante la interpretación del Requiem, un espectador sufrió una lipotimia y fue atendido por el público de la zona, que le abanicó. Según algunos testigos, varios espectadores tuvieron que sacarlo de la sala porque los acomodadores no aparecieron hasta el final. La soprano excusó la debilidad de su intervención en el Libera me achacándola a su impresión ante el suceso.

Isabel Vázquez dijo ayer que el hombre que sufrió la lipotimia, ya restablecido, fue atendido por "médicos que había alrededor", y reconoció que "no todos los días" existe un servicio de atención médica en el auditorio. Añadió que por el número de plazas "tampoco sería obligatorio". En las salas de relieve de la CE al menos un acomodador por cada zona atiende los imprevistos y personal competente las indisposiciones.

El pitido del sábado provocó un altercado entre algunos espectadores, que se acusaban entre sí. Giulini, y después los solistas, abandonaron la sala. Tuvo que hacerse cargo de la situación el organizador del concierto, Alfonso Aijón, quien dijo que se estaba investigando la causa. El pitido, que Aijón recordó ayer como "insoportable", no se localizó. El espectáculo prosiguió con el Dies irae ahogando la molestia.

Isabel Vázquez, que no se encontraba en el recinto sinfónico, señaló que tanto la jefa de sala, Eleria Acevedo, como el de mantenimiento, Miguel Angel Mazón, seguían ayer, día y medio después, investigando. Añadió que se está intentando localizar a la portadora del audífono.

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