El Ejército del Aire pide participar en el nuevo orden aéreo de Madrid

La Fuerza Aérea "debe participar" en la "gestión y planeamiento" de la reorganización del espacio aéreo de Madrid, según señala el último número de la Revista de Aeronáutica y Astronáutica, que pide también que "la agilización del tráfico no se haga a costa de la disminución de las operaciones de entrenamiento del Ejército del Aire".

El ministro de Defensa, Julián García Vargas, y el de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, anunciaron el pasado 12 de septiembre que sus departamentos estaban negociando la reorganización del espacio aéreo de Madrid, para intentar solucionar los problemas crónicos de congestión que padece el aeropuerto de Barajas. Los ministros señalaron que incluso se estudiaba la utilización por vuelos civiles de la base militar de Torrejón.Como resultado concreto de estas. negociaciones, los ministros anunciaron que la retirada de Torrejón de los 72 cazas F-16 del Ala 401 de la Fuerza Aérea de EE UU, que estará completada antes de mayo, permitiría la apertura de dos nuevos sectores al tráfico civil y la reducción de las servidumbres militares de Barajas. La Revista de Aeronáutica y Astronáutica, que edita el Cuartel General del Ejército del Aire, se muestra crítica con estas conclusiones, ya que, en su opinión, "la posible reducción del tráfico aéreo que va a suponer el abandono de la base del Ala Táctica 401 de la USAF [ ...] se va a ver compensada por la concentración de unidades [españolas en Torrejón] prevista para la rentabilización de las instalaciones".

Máxima prioridad

La Fuerza Aérea advierte que en Torrejón se encuentra el "servicio de alerta permanente", que consiste en dos aviones constantemente preparados para despegar e interceptar cualquier objeto volante no identificado que penetre en el espacio aéreo español. Se trata de misiones, según el artículo, "de dedefensa aérea activa y urgencia máxima" que "no deben dar lugar a problemas, ya que tienen la máxima prioridad en el espacio aéreo".Además, en Torrejón están los aviones más avanzados de la Fuerza Aérea, los F-18, cuyas misiones de entrenamiento "no se pueden ver constreñidas". Dichos aviones "requieren la máxima flexibilidad e independencia para emplear al máximo su combustible" en las zonas de ejercicios y no esperando autorización para entrar o salir de ellas, según el artículo.

La publicación recuerda que la Fuerza Aérea cuenta en el área de Madrid con dos bases (Torrejón y Getafe), un aeródromo (Cuatro Vientos) y un aeropuerto (zona militar de Barajas): "Es evidente que el Ejército del Aire es uno de los principales usuarios, si no el principal, del área terminal de Madrid, y no con unidades de segundo orden, sino que se encuentran en primera línea y prestan servicios esenciales para la nación". El problema se agrava en Torrejón, "y no sólo por su situación geográfica, cinco millas náuticas del aeropuerto de Barajas con pistas cruzadas, sino también por la densidad y variedad de sus tráficos".