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El Ejército federal permite a Mesic visitar Dubrovnik

HERMANN TERTSCH ENVIADO ESPECIAL Un convoy naval con ayuda humanitaria, en el que viajaba el presidente nominal de la nominal federación yugoslava, Stipe Mesic, llegó ayer a la ciudad adriática de Dubrovnik, asediada por el Ejército federal desde hace un mes mientras en Croacia oriental, las fuerzas federales bajo mando serbio incrementaban dramáticamente sus ataques contra Osijek y Vukovar. El de ayer fue uno de los días más sangrientos de las últimas semanas en Eslavonia con, al menos, diez civiles muertos, en la ciudad de Osijek.

Como el día anterior, la población civil de las principales ciudades de Eslavonia pasó toda la jornada encerrada en los refugios por la persistencia de los bombardeos.La aviación, federal atacó de nuevo Vukovar alcanzando con una bomba el centro médico. Al cierre de esta edición no se conocía el balance de víctimas de este ataque. Nuevos refuerzos de reservis1as serbios llegados ayer a Eslavonia occidental y a la región de Banija al sur de, Zagreb parecían confirmar la decisión de Belgrado de levar a cabo una escalada de sus ofensivas ante la creciente presión internacional sobre Serbia. cerca de 50.000 ciudadanos y guardias nacionales que soportan desde hace cuatro semana un bloqueo total por, parte del Ejército federal y la guerrilla serbia.

El transbordador Slavija, en el que viajaban el aún presidente de la extinta presidencia colectiva yugoslava, Stipe Mesic; el primer ministro, Franjo Greguric, y otras personalidades de la política, las artes y las letras de Croacia, llegó a Dubrovnik tras más de 36 horas de espera en alta mar y nueve de registro Por fuerzas de la Marina federal. Estas habían acusado al convoy de intentar introducir armas para los defensores de la ciudad. Tras largas negociaciones entre Mesic y el viceministro de defensa, el almirante Stane Brovet, el Ejército permitió el paso tanto al Slavija como a la treintena de barcos que persistían en sus intentos por entrar en Dubrovnik.

Mesic calificó la llegada del convoy como una muestra de la decisión inamovible de Croacia de defender su territorio contra unos "generales locos", en referencia al mando del Ejército federal. Mesic manifestó que "si se sigue ejerciendo la violencia contra Dubrovnik, Dubrovnik responderá con fuerza".Poco después de llegar el convoy a la ciudad, un avión federal la sobrevoló y atacó unas posiciones de la Guardia Nacional croata en los suburbios produciendo varios heridos. En Slano, pocos kilómetros al norte de Dubrovnik, la artillería federal sometía a constante fuego las posiciones croatas reforzadas por unidades, llegadas de la vecina Ston.

Las fuerzas croatas lograron en la noche del miércoles romper en varias ocasiones el bloqueo naval de Dubrovnik e introducir en la ciudad armas y munición. Varios comandos de la Guardia Nacional burlaron con pequeñas lanchas los controles federales, según confirmó EL PAÍS en un centro de operaciones croata en el frente de Slano.

"Vamos a reconquistarlo todo"

"Estamos decepcionados por la actitud de Europa. Cada alto el fuego que intentamos respetar nos cuesta 15 kilómetros de nuestro territorio croata. Pese a ello, aún confiamos en que Europa se dé cuenta lo que está pasando aquí". Zoran Simic, es el joven comandante dr la Guardia Nacional en Ston, desde donde dirige los movimientos de apoyo a los fuerzas sitiadas en Dubrovnik. Antes de la guerra era oficial en la Academia Naval de Split donde formó "a muchos que hoy nos están disparando desde los buques de guerra que están ahí fuera".Ston es una bellísima aldea medieval amurallada entre lagunas e isletas en la que Simic ha instalado su cuartel general. No quiere hablar sobre las operaciones que, al parecer con éxito, ha realizado para suministrar armas y víveres a guardias nacionales aislados en diversos puntos de la cost, incluido Dubrovnik. Tampoco desea comentar una posible operación a gran escala para romper el cerco.

Sin embargo, conoce muy bien a su enemigo y sabe de sus debilidades. "Estan teniendo graves problemas con sus reservistas. Muchos están detenidos por su desacuerdo con esta guerra. Cada día que pasa en esta guerra, el régimen serbio tiene que incrementar el terror sobre sus propios soldados para que combatan contra nosotros. Y nosotros no vamos a ceder ni un centímetro de nuestra tierra. Vamos a reconquistarlo todo".

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