EI Príncipe anuló una visita a la Universidad de Sucre ante las protestas estudiantiles

La delegación que acompaña al Príncipe de Asturias durante su primer viaje oficial a Latinoamérica decidió suspender la visita de don Felipe a la ciudad boliviana de Sucre después de que algunos estudiantes mostraran su rechazo a la presencia del heredero de la Corona.

El apretado programa también influyó en la suspensión de la visita. El secretario de Estado para la Cooperación Internacional e Iberoamérica, Inocencio Arias, declaró: "Cuando lo apretado de una agenda obliga a renunciar a alguno de los actos, se suprime aquél que puede resultar más conflictivo o potencialmente vidrioso".Don Felipe tenía previsto visitar la Facultad de Derecho y pasear por el patio de la universidad de San Francisco, en Sucre, al igual (que tuvo contactos con estudiantes universitarios de su misma carrera en Buenos Aires (Argentina) el pasado viernes. Sin embargo, el acto fue suprimido de la apretada agenda del Príncipe en arte porque era mejor llegar al aeropuerto cuanto antes, para trasladarse a Santa Cruz, y, muy especialmente, porque desde las 12 del mediodía locales (cuatro horas antes de la prevista visita de don Felipe) se concentraron estudiantes con pancartas contrarias a la visita. Uno de los universitarios comentó que las autoridades habían quemado sus pancartas y les habían obligado a dispersarse. Este estudiante añadió que las pancartas decían "500 años ¿de qué?". El estudiante lamentaba la visita de un descendiente de la Corona del país que, en su opinión, les ocupó y humilló.

Ayuda a Potosí

Por lo demás, el príncipe Felipe comenzó su tercera jornada oficial en Bolivia con una visita a Potosí, la ciudad de Latinoamérica más favorecida por la cooperación española, con 80.000 millones de pesetas. España rinancia la construcción de la carretera que unirá. esta ciudad con Sucre (57.000 millones de pesetas), distribuye diariamente desde febrero 33.000 desayunos para los niños (leche con vitaminas y galletas) y fleva adelante la restauración del centro histórico.

El embajador español en Bolivia, Carmelo Angulo, comentaba la extrerria necesidad de ayuda de este país, el más pobre de Latinoarnérica.

Durante su visita a Potosí, el Príncipe de Asturias aseguró en un discurso que "la Corona española siempre procuró, desde la llegada de los españoles a América", dijo don Felipe, "que la dignidad del indígena fuera respetada aunque, a menudo, la distancia y la sinrazón de la voluntad humana facilitaron la desobediencia de sus mandatos y disposiciones".

Posteriormente, el Príncipe se trasladó hasta la bocamina Paillaviri, en las minas de plata de Potosí, donde prometió a los representantes de los mineros ayudarles para que puedan arreglar su sede social.

Durante su recorrido por la Casa de la Libertad, don Felipe atendió, sin poder contener la risa en ocasiones, las divertidas explicaciones del director del archivo, Joaquín Gantier. Éste, en cierto momento, levantó la voz y dijo: "Y sólo resuena un nombre: Isabel, Isabel...". Gautier se refería a Isabel la Católica, pero provocó, involuntariamente, más de una sonrisa entre la delegación española.