¿Desiguales para siempre?
¿La irrefutable y ya incuestionable muerte del comunismo significa que la radical desigualdad natural entre los hombres no podrá jamás ser mínimamente contenida? ¿La lógica histórica obligará a justificar la perpetuidad de los pares de opuestos de hombres y pueblos, ricos frente a hombres y pueblos pobres, opresores frente a oprimidos, explotadores frente a explotados, felices frente a infelices, actuantes frente a pacientes? Los pensadores de la antigua Grecia, cuando reflexionaban sobre su gran ha zaña histórica, la démokratía, afirmaban que la suprema divisa de la democracia, isonomía, igualdad ante la ley (con sus fundamentales miembros de parrésía, libertad de expresión; iségoría, libertad de expresión política, y eleuthería, sencillamente libertad en general), podría llegar a ser una institución teórica vana sin una cierta igualdad de la propiedad (isomoiría) (vide Diodoro de Sicilia, 2.39). Yo creo que la colosal muerte del comunismo se ha dado porque éste conculcó la libertad en nombre de la igual dad de la propiedad, con lo que asesinó el fin de toda igualdad, que es la libertad sin más, la libertad de hacer lo que a uno le plazca. Por el contrario, la tradición democrática (desde los griegos) ha visto en la necesidad de cierta igualdad económica un agente más para la libertad, situando a ésta en el fundamento sagrado de toda comunidad. El comunismo histórico (no creo que el teórico) ha conseguido sólo la igualdad de los esclavos, asesinando precisamente los anhelos de los; primeros comunistas teóricos, que veían en la libertad plena el paraíso comunista (verbigracia, Godwin, Babeuf ... ). Si bien se mira, el comunismo ha hecho más daño a la igualdad que cualquiera otra filosofia política. La importancia de elegir el método para llegar a la libertad seguirá siendo la hipóstasis de la propia libertad. Hoy sabemos que no todos los caminos conducen a la libertad y que el camino a la libertad es la propia libertad, que lleva detrás, irremisiblemente, a la igualdad.- Martín-Miguel Rubio Esteban.
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