Recuerdos y escatología

Comenzó Nati Mistral su espectáculo cantando, Banderita, tu eres roja ... y lo explico porque vienen los moros, y ella iría al Estrecho a cortarles el paso. Una dulce broma: los moros se fueron en 1492 -los que quedaron fueron expulsados luego, con los judíos, qué error- y no han vuelto a pasar el estrecho hasta que los trajo Franco precisamente para volver a colocar la banderita roja y gualda.La que cantaba el buen pasodoble de Alonso era la que llevaron los militares españoles para quitarles a ellos sus arenales, pedregales, pitas y chumberas. Ahora vienen los moros como indigentes: otra cosa.

Para el público de su estreno, y de su vida, un chiste de Nati Mistral, divertido y patriótico. Empezó así y terminó contando chistes cochinos: dicen los psicólogos que las gentes de edad tienen inclinación por esa escatología: también fue reída, aunque hubiera escalofríos de mal gusto en algunos.

Repertorio

Nati Mistral tiene una voz privilegiada, que seguramente no necesitaría en un teatro pequeño tanto equipo sonoro, y un talento de actriz canzonetista: interpreta las letras. Toma el repertorio de otras y otros, del cuplé al poema culto, sin desdeñar el flamenco: el repertorio está bien escogido entre éxitos, y ella le da su acento y su simpatía personal.Lástima que no cite casi nunca a los autores de las letras: ella, que se esfuerza en decirlas bien, se apoya en su posible belleza, y lo consigue. Salvo los intermedios hablados, Nati Mistral montó muy bien su recital, con los Gemelos y con el Maestro Ibarbia y sus músicos: buena musicalidad, buena armonización, un aire propio en la manera de cantar. Mucho mas de lo que se suele tener.

NostáIgica, muy trabajada en la línea de locamp: las personas de edad gustamos de ello, aunque tenga que luchar con nuestros recuerdos de lo que fueron los originales.

Actuó como en su casa: con el públ leo lleno de sus amigos a los que iba dedicando sus canciones, con su soltura y su arte popular de siempre, y tuvo el éxito que merecía. El recital está muy bien trabajado, muy bien preparado.