El sinvivir del honor militar
El teniente coronel Anatoli, que no quiere revelar su apellido, está orgulloso de sus tropas y de su regimiento de paracaidistas de élite, en los que las reyertas e incluso los asesinatos en los cuarteles, comunes en otras divisiones, son relativamente raros.Sin embargo, opina que "sería mucho mejor si nos convirtiéramos en una fuerza profesional, en la línea del nuevo mando militar soviético, que pretende reducir el reclutamiento obligatorio y confiar en los militares de carrera.
"Pero este cambio llevará bastante tiempo", dice Anatoli, para quien lo importante no está en cómo se le llame al ejército, "amateur o profesional, sino en las condiciones de vida". "Sí voy a ser llamado profesional, me deben pagar más, pero el Gobierno no tiene mucho dinero. Así que continuaremos sirviendo por honor y no por el salarlo".
Anatoli, de 41 años, gana 800 rubios al mes, menos de 30 dólares (poco más de 3.000 pesetas) al cambio para el turista, aunque bastante más que el ingreso medio soviético. Los soldados de reemplazo ganan 50 rubios al mes (unas 200 pesetas).
Pero la diginidad de los soldados es frecuentemente violada con tareas como retirar nieve, recoger patatas o construir bloques de apartamentos. "Nuestra división hace un montón de cosas que jamás deberían ser hechas por un Ejército", dice Anatoli.
Incluso oficiales con 20 años de servicio viven a menudo con sus familiares en una pequeña habitación separada por una cortina del siguiente capitán y su familia, con una cocina y un baño común, y donde una lavadora es un lujo inimaginable. Y esta situación de escasez de viviendas, agravada con el regreso de cientos de miles de soldados de Europa del Este, puede empeorar aún más si las repúblicas bálticas y otras regiones de la URSS expulsan al Ejército soviético.
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