Interior y Renfe hacen frente con un gabinete de crisis a la ofensiva de ETA contra los ferrocarriles

Interior y Renfe coordinan, a través de un gabinete de crisis instalado en la sede de dicho departamento, las actuaciones ante la ofensiva lanzada por ETA contra las líneas férreas hasta el próximo día 25. Por otra parte, a las dos de la tarde de ayer se restableció el tráfico de trenes en el tramo El Escorial-Medina del Campo, tras 19 horas de interrupción y un minucioso rastreo de la vía. La estación de Ávila tuvo que ser desalojada por una falsa amenaza de bomba.

El gabinete de crisis está presidido por el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, máxima autoridad de Interior en ausencia, por vacaciones, de su titular, José Luis Corcuera. Forman parte de este organismo un coronel de la Guardia Civil y un comisario de policía, así como el responsable de seguridad de Renfe, Carlos Román.Fuentes de la compañía ferroviaria indicaron que el director general de la misma, Eduardo Moreno, está dirigiendo las operaciones necesarias para atenuar en lo posible los efectos de la ofensiva etarra, en estrecho contacto con la presidenta de Renfe, Mercé Sala, que se encuentra en Barcelona. Desde el gabinete de crisis se coordinan las decisiones de cerrar o abrir los tramos amenazados, que corresponden en último extremo a Renfe, una vez completas las operaciones de rastreo, que dirige Interior con el apoyo de especialistas de la empresa pública.

A las dos de la tarde de ayer se reanudó el tráfico entre las estaciones de El Escorial (Madrid) y Medina del Campo (Valladolid), interrumpido desde que el lunes un comunicante avisara de la colocación de: un artefacto entre las estaciones de Arévalo y Velayos.

El cierre de ese tramo, durante 19 horas, obligó a suspender algunos trenes de cercanías y regionales, así como a desviar los que unen Madrid con el norte de la Península.

Efectivos de la Guardia Civil, con perros rastreadores, y voluntarios de Renfe examinaron los 30 kilómetros de vía, sin encontrar ningún artefacto., En estas operaciones se utizan trenes buscadores, que consisten en locomotoras blindadas precedidas por un vagón, en la mayor parte de los casos. Se trata de que dichas locomotoras, por su gran peso, hagan explosionar cualquier artefacto que se active al contacto.

Fuentes de Interior y de la compañía admitieron que no existen instrumentos de detección adecuados para estos casos y que "los rastreos son básicamente visuales".

La reanudación del tráfico entre El Escorial y Medina del Campo se demoró por una amenaza de bomba contra la estación de Ávila, que permeneció desalojada durante más de una hora, hasta que se comprobó que era una falsa alarma, informa Carlos de Miguel.