Aumento peligroso en Valencia y Andalucía
Hasta el 7 de Julio el número de incendios en la Comunidad Valenciana había aumentado en un 50% respecto al mismo periodo de 1990. En los siete primeros meses de 1991 se registraron 245 incendios. Del mismo modo, el total de superficie arrasada por la acción del fuego alcanzó las 714 hectáreas (331 en la provincia de Valencia, 211 en Alicante y 171 en Castellón). La mayor parte de la superficie afectada correspondía este año a zonas de matorral bajo -420 hectáreas- y el resto era arbolado. El pasado año se registraron 711 incendios en todo el territorio valenciano y quedaron arrasadas 23.659 hectáreas.Sin embargo, los 50 incendios que se desataron el sábado 13 en el sur de Valencia a raíz de una tormenta eléctrica han disparado las estadísticas. Según cálculos aproximados, estos incendios, que tardaron en algunos casos hasta cinco días en ser apagados, han calcinado cerca de 8.000 hectáreas de monte en las comarcas de la Vall de Albalda y La Safor. Entre el 8 y el 14 de julio se han producido 80 incendios en la Comunidad Valenciana.
El titular de la recién creada Consejería del Medio Ambiente, Antonio Escarré, interrogado por la cadena SER al respecto, restó importancia a los incendios y tras comparar a la vegetación valenciana con la de California, en la que, a su juicio, los incendios se inscriber en ciclos naturales de quema y regeneración, dijo: "aquí una parte importante de nuestra zona también está bastante bien".
Hectáreas arrasadas
También en Anda¡ucía el número de incendios, se ha disparado, en el presente verano, llegando incluso a doblar en sólo un mes y medio, la cifra de hectáreas arrasadas entre junio y octubre de 1990, informa Diego Nárvaez. Desde que el pasado 1 de junio comenzara a aplicarse el Plan de Prevención y Extinción de Incendios Infoca 92, han ardido en la región más de 7.000 hectáreas de monte, cuando en los cuatro meses de vigencia del programa en el año anterior esta cifra fue de 4.229.Este espectacular aumento ha alarmado a la Administración autonómica, que ha convocado para mañana a los representantes de los distntos organismos implicados en la lucha contra el fuego. Fuentes de la Agencia del Medio Ambiente (AMA) han señalado al respecto que 1991 podría ser un año "catastrófico", más aún si se tiene en cuenta que se ha invertido la proporción entre las áreas arboladas y desarboladas arrasadas, que hasta ahora venía siendo de un 40% frente a un 60%.
Durante esta semana, dos incendios han destruido unas 3.700 hectáreas de monte en la sierra norte de Sevilla, donde han llegado a registrarse temperaturas en torno a los 45 grados en el verano más calurosos de los últimos 50 años.
Junto a Sevilla, Málaga es la provincia andaluza más afectad por los incendios forestales.
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