Los reclusos amotinados en Herrera se rinden y liberan a los funcionarios secuestrados
El motín de la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) terminó ayer a las nueve de la mañana, después de 21 horas de tensión. Los tres funcionarios y la psicóloga del centro, que fueron tomados como rehenes, fueron liberados sin daños físicos. Durante los incidentes, protagonizados por más de 20 reclusos, fue asesinado un interno marroquí. Los amotinados se rindieron "sin condiciones", según fuentes oficiales, pero después de que se difundieran sus reivindicaciones, centradas en las mejoras de la vida carcelaria.
La verja de la prisión se abrió a las 9.40. Las Unidades Especiales de Intervención de la Guardia Civil abandonaban el recinto. El motín había terminado. Los tres funcionarios y la psicóloga recobraban la libertad visiblemente cansados.
La rendición de los presos se logró después de una larga noche de conversaciones entre presos y funcionarios. Un recluso que no participaba en la revuelta actuó, como intermediario.
El gobernador civil de Ciudad Real, Tomás Morcillo, señaló que no hubo negociación con los presos, sino sólo diálogo. Aseguró que se rindieron "sin condiciones" y señaló que era difícil determinar el número de presos amotinados (entre 21 y 27).
Los incidentes comenzaron a las 11.30 del miércoles, cuando una decena de presos del módulo 1, encabezados por Cristóbal del Moral Fernández, secuestró a los tres funcionarios de servicio y una psicóloga. Durante los primeros momentos de la revuelta, el interno marroquí Jalili Boubalati, de 25 años, fue asesinado con un puñal de fabricación casera. Fuentes penitenciarias que cita la agencia Efe consideran autores de la muerte del magrebí a Del Moral y Fernando Vega Ayude.
