Mitterrand y Cresson, a la baja

Los franceses tienen un estómago muy resistente para los escándalos políticos y financieros. Sin embargo, el clima de podredumbre provocado por la multiplicación en las últimas semanas de los llamados affaires -financiación ilegal del Partido Socialista, juicio a los supergendarmes de Mitterrand, expulsión de Abdelmumen Diuri- parece estar sobrepasando sus amplias tragaderas. Si a ello se le añaden los primeros signos de la minicrisis económica -incremento del paro, protestas juveniles en los suburbios, renacimiento del debate sobre la inmigración y el racismo-, el resultado puede medirse en las encuestas de opinión.Tres sondeos diferentes, difundidos ayer por la SOFRES, Paris-Match y BVA-Europe 1, revelan un espectacular descenso de la popularidad de François Mitterrand y Edith Cresson. El presidente, según BVA-Europe 1, pierde nueve puntos, y su popularidad -48% de opiniones favorables, 42% de opiniones desfavorables- se sitúa en el nivel más bajo de los últimos cinco años. En cinco semanas en el Hôtel Matignon, Cresson ha perdido 16 puntos de popularidad. Ahora sólo un 27% de los franceses encuestados emite un juicio positivo respecto a ella, un 42% le otorga un suspenso y un 31% afirma que todavía no se ha formado una opinión.