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Craxi y Occhetto fracasan en Sicilia

El Partido Socialista Italiano (PSI), de Bettino Craxi, ya no crece e incluso retrocede; el Partido Democrático de la Izquierda (PDS), con el que Achille Occhetto pretende reformar la rica herencia comunista de Enrico Berlinguer, sigue su caída, y la Democracia Cristiana (DC) aumenta su alta cuota de poder frente al éxito de La Rete (La Red), el movimiento de regeneracionismo político encabezado por el ex alcalde de Palermo Leoluca Orlando, que supera con creces su primera prueba de las urnas. Los resultados de las elecciones regionales del domingo en Sicilia confirman la tendencia al voto de protesta contra un sistema partitocrático aquejado por una crisis histórica y alejan la perspectiva de que se anticipen los comicios generales.

El 9 de junio, los itallanos dieron la sorpresa de acudir en masa a un referéndum para hacer más transparente la ley electoral, que los partidos del Gobierno habían asegurado que a nadie interesaría. Quien más se equivocó, recomendando la abstención, fue Bettino Craxi, líder del PSI.Modernista y pragmático, el ex primer ministre, Craxi aspira claramente a dirigir una segunda República presidencialista con la fuerza de un partido que estaba rompiendo estrepitosamente su modesta cuota electoral de posguerra, siempre próxima al 15%, coincidiendo con el proceso de descomposición comunista. Pero Sicilia ha dado un segundo golpe a esas aspiraciones: en los comicios regionales del pasado domingo, el PSI no sólo no logró la subida de siete u ocho puntos que se proponía, sino que retrocedió más de un 2% con respecto a los resultados de las municipales celebradas hace un año en la isla, para volver a su fatídica cuota histórica.

Las elecciones sicilianas son significativas, porque aproximadamente el 10% del electorado de Italia ha sido convocado a ellas en un momento en el que el presidente de la República, Francesco Cossiga, mantiene un escandaloso enfrentamiento público con la Magistratura, con el Parlamento y con su propio partido, por favorecer una reforma institucional más próxima a los deseos presidencialistas de Craxi que al sentir del grueso de la Democracia Cristiana.

El PDS, en tercer lugar

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El PDS de Occhetto, contrario también al presidencialismo, que había celebrado como un éxito el referéndum de hace una semana, vio, sin embargo, confirmado el domingo su tendencia a la baja y la pérdida definitiva de la segunda posición, tras la DC, que el PCI tuvo en Italia, desde la pos guerra. Los casi tres puntos que pierde fueron a la escisión ortodoxa, refundación comunista. Sin embargo, la cuota global de estas dos formaciones queda casi un 5% por debajo de la que los comunistas obtuvieron en las últimas regionales sicilianas, en 1986.

Parte del antiguo voto comunista ha ido a parar al movimiento La Rete, del ex alcalde democristiano de Palermo Leoluca Orlando, que, con una cuota del 7,3%, se consolida, tras ésta su primera prueba electoral, como una fuerza política a tener en cuenta. La Rete posee fuertes connotaciones sicillanas por el carisma de su líder y su énfasis en la lucha anti-Mafia, aunque ha logrado sentar infraestructura en gran parte de Italia para presionar por la transparencia democrática pedida en el último referéndum. Buena parte de sus votos de ayer se los quitó Orlando a los verdes y a otros grupúsculos de protesta. Pero Calógero Manino, ministro siciliano y democristiano del Medio Ambiente, se apresuró a recordar que en la provincia de Palermo, donde el movimiento del ex alcalde se coloca como segunda fuerza, con un 25% del electorado, La Rete había mordido también en carnes de la DC. Manino destacó que, no obstante, la DC ha aumentado en Sicilia su ya amplia cuota hasta el 42%, lo que ha ocurrido en parte gracias a la caída del ultraderechista MSI.

El ministro se abstuvo de recordar que Salvo Lima, el hombre de confianza en Palermo del primer ministro, Giulio Andreotti, declaraba ayer mismo en el juicio por delitos mafiosos de su antiguo asesor y ex alcalde palermitano, Vito Cianciamino. Las conexiones mafiosas de Arístide Gunella, representante tradicional del PRI en Sicilla, han influido en la pérdida de más de dos puntos sufrida por ese pequeño partido, que hasta el mes pasado formó parte del Goblerno.

Los portavoces socialistas y democristianos subrayaron que el Gobierno gana estabilidad con estos comicios, ya que los dos principales partidos que lo integran mantienen aproximadamente sus posiciones. Parece lógico que al PSI no le interese acudir a unas elecciones generales con estos resultados y que la DC resuelva el caso Cossiga antes de dar ningún paso.

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