La enfermera Leo fue asesinada con 14 cuchilladas por un violador
La enfermera Isabel Leo González, de 32 años, murió a causa de las 14 cuchilladas que le asestó un individuo aún no identificado, según ha revelado la autopsia. Los investigadores del caso sospechan que el autor del asesinato fue un violador, tras descartar "totalmente" la hipótesis de que el móvil de la agresión fuese el robo.El cadáver de la enfermera, que trabajaba en la planta de Cirugía del hospital Gregorio Marañón, fue encontrado sobre las cuatro de la tarde del pasado martes por un jardinero. El cuerpo de la víctima se hallaba dentro de su automóvil, un Seat Ibiza, que estaba aparcado en la calle de Nicolás Salmerón, cerca del cementerio de La Almudena.
Caída en el piso del coche
Agentes del Grupo de Homicidios de la Brigada Judicial comprobaron que el cuerpo de Isabel estaba caído en el piso del vehículo, en el espacio existente entre los asientos delanteros y los traseros. Vestía un pantalón vaquero y una camisa roja, las mismas ropas con las que salió sobre las 7 de la mañana del pasado día 2 del hospital Gregorio Marañón, tras haber finalizado su jornada laboral.La autopsia forense permitió descubrir que el homicida asestó a la víctima 14 cuchilladas con una navaja o un punzón. Las heridas están concentradas, sobre todo, en el costado izquierdo. Cerca de la nuca presenta tres o cuatro pinchazos, que posiblemente le asestó el criminal con la intención de rematarla.
La mujer tenía rotos los botones de la camisa y las bragas rasgadas y metidas dentro de uno de los bolsillos del pantalón vaquero. El ensañamiento con que actuó el agresor y el hecho de que la víctima tuviera quitadas las bragas induce a sospechar con fundamento que fue atacada por un violador. Pero no se ha comprobado si éste llegó a satisfacer sus instintos, dado el avanzado estado de putrefacción en que se hallaba el cadáver. Isabel conservaba el bolso con unas 4.000 pesetas y diversas tarjetas de crédito, así como los anillos, el reloj y un colgante de oro.
Por otra parte, las investigaciones no han encontrado hasta ahora ninguna relación entre la muerte de la enfermera y la del urólogo Eugenlo Rivero, quien el domingo pasado fue asesinado de un disparo en la nuca poco después de salir de su domicilio de la calle de Castelló.
En el cementerio viejo de Carabanchel será enterrada hoy Isabel Leo, cuyo cadáver saldrá a la 12.45 del Instituto Anatómico Forense. Convocados por el Sindicato de ATS de España (Satle), los trabajadores del hospital Gregorio Marañón y de otros centros médicos guardaron ayer un minuto de silencio en homenaje a su compañera.
