Un médico, muy grave por un disparo recibido en la nuca junto a su casa

El urólogo Eugenio Rivero Sánchez, de 56 años, se encuentra muy grave a causa de un disparo de arma de fuego con orificio de entrada por la nuca y con salida por un pómulo. Un desconocido le disparó a bocajarro cuando a las diez de la mañana de ayer salía de su casa, en la calle de Castelló, según fuentes policiales. La Brigada de Información (antiterrorista) y la Brigada Judicial investigan el hecho, cuyas motivaciones se desconocen.

Familiares de Rivero barajan la hipótesis de que éste fuera víctima de un atraco, aunque tampoco descartan "que alguien le confundiera con otra persona", según afirmó una de sus hermanas.

Eugenio Rivero, que trabaja desde hace 18 años en la clínica San Camilo, fue encontrado caído en el suelo por los clientes de un bar próximo. Uno de éstos le reconoció y recomendó su trasladado al citado centro hospitalario, situado a unos 200 metros de distancia.

Rivero vivía con su hija, Marta, en el numero 98 de la calle de Castelló. Su mujer falleció hace unos ocho meses, según los vecinos. "Es un hombre muy callado y prudente, que no se metía con nadie y hacía su vida como cualquier otro", refiere Mariano Recio, propietario de una churrería próxima al lugar del suceso.

Ningún vecino vio al agresor, aunque algunos escucharon la detonación. "Fuimos a ver qué pasaba y lo encontramos sobre la acera sangrando abundantemente, pero allí no había nadie", agregaron.

Al cierre de esta edición, su estado de salud era muy grave, y "aunque hasta el último momento hay esperanza", según dijo la enfermera jefe, la trayectoria del disparo hace temer un desenlace fatal.