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Una concentración de gitanos creó inquietud en la calle calle de Goya

Francisco Peregil

Una concentración de gitanos en el barrio de Salamanca sembró ayer la inquietud entre el vecindario, que temía que se produjesen incidentes. Casi cien gitanos residentes de la Rivera de San Fermín, en el distrito de Usera, se concentraron desde las once de la mañana frente a la sede de la compañía Unión Fenosa, en la calle de Goya, para exigir que les suministraran el servicio de electricidad que les cortaron el pasado martes.Aunque los manifestantes se mostraron en todo momento correctos, sin ningún brote de violencia, numerosos vecinos y comerciantes de la zona no tuvieron reparos en expresar su temor ante "el jaleo" que tenían en el barrio.

La dueña de un comercio de ropa de la calle de Castelló mantuvo su tienda cerrada con llave toda la mañana, y cada vez que llegaba un cliente le decía que excusara las molestias. Rápidamente explicaba que no se atrevía a dejarla abierta con semejante "movida".

Varios vecinos de la zona, cuando se enteraron de lo que pedían los manifestantes, sentenciaban: "Lo que le pasa a esta gente es que no paga y por eso les cortan la luz".

Sin embargo, varios educadores de calle del Consorcio de la Población Marginal aseguraron que la empresa suspendió el servicio en la barriada porque la compañía que les construyó las casas donde habitan ahora les dejó unas deudas no pagadas todavía. "Estas familias no deben nada a Unión Fenosa", dijeron los educadores.

Totalmente ineficaz

Otros vecinos se quejaban de que la presencia policial -una decena de furgonetas con agentes antidisturbios y varias patrullas de la Policía Municipal- era totalmente ineficaz. "La policía está ahí 'por si acaso', ya ves tú, 'por si acaso', como si el escándalo que están armando no fuese suficiente", comentaba un vecino vestido con traje a un compañero suyo.

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Los manifestantes no dejaron de gritar en todo momento "queremos luz, queremos luz", salvo cuando en los momentos de relax cantaban: "Mama Chicho me toca, me toca cada vez más". Siempre marcaban el ritmo con latas y palos.

A las dos de la tarde salieron los representantes de los gitanos y del consorcio y les comunicaron el resultado de las negociaciones: "Tenemos luz hoy [por ayer] a las cuatro de la tarde".

Unión Fenosa, según indicaron varios educadores, había suprimido el suministro de electricidad el pasado martes sin previo aviso y sin dar ninguna explicación. "Nos dejaron en un momento sin neveras, sin luz y sin nada", afirmó uno de los manifestantes.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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