"No me mate"

El problema de Puerto Rico, y el que preocupa al pueblo, no es hablar oficialmente en español o en inglés, si no saber decir en varios idiomas la frase "Por favor, no me mate".La policía de San Juan, que amenaza con huelga de celo por considerarse muy mal pagada, reveló que en un solo año los homicidios aumentaron el 28%, y los robos con violencia el 13%, Aquí no hay noche sin un par de muertos declarados. Otros ni siquiera aparecen.

Para una población urbana de un millón de habitantes, esta hermosa ciudad del Caribe registra 35.000 delitos graves al año. La gente vive aterrada. Muchas casas, con doble reja, tienen el aspecto de auténticas jaulas humanas. Que los ciudadanos vayan con revólver al cinto a una cena es costumbre habitual. Asistí a una boda en la que a un invitado se le cayó la pistola bailando merengue. Al novio, un conocído arquitecto en la isla, le robaron y destrozaron su apartamento mientras, en presencia del juez, le decía sí a su amada.

El gobernador Hernández Colón me confió que las cárceles están saturadas. Añadió que la precaria situación economica de la policía no afecta a su trabajo. Esto se lo creen muy pocos. También me adelantó que quizá vuelva a presentarse por tercera vez en las próximas elecciones de 1992.

El presidente de la Cámara de Representantes, Rony Jarabo (hijo del último ejecutado a garrote vil en España), dijo que, por incumplir lla normativa federal de prisiones , el Gobierno paga millones de dólares al año en multas al Tr'bunal Federal, lo cual tampoco soluciona el problema. Ya se ha iniciado el debate público sobre la posible implantación de la pena de muerte.

La vida, repiten muchos puertorriqueños, no vale aquí ni un chavo. Al parecer, tienen razón.