Hollywood lanza dos Robin Hood rivales

Dos versiones de Hollywood sobre Robin Hood se acaban de rodar en Inglaterra con dos actores que rivalizarán en la taquilla este verano. Robin Hood: prince of the thieves (príncipe de los ladrones) es una superproducción con Kevin Costner como protagonista, mientras que en The adventures of Robin Hood el casi desconocido actor Patrick Bergin encabeza el reparto. La película con Kevin Costner ha costado casi cinco mil millones más que la otra.

El terreno se encuentra dispuesto para un enconado enfrentamiento en la taquilla. Aunque el combate, como aquel de David y Goliat, se promete desigual. Por un lado, Robin Hood: prince of the thieves, dirigida por Kevin Reynolds, una superproducción de 60 millones de dólares (6.480 millones de pesetas) de Morgan-Creek Productions, con Kevin Costner como protagonista y nada menos que Sean Connery en un papel secundario; por otro, The adventures of Robin Hood, dirigida por John Irvin, producida por Century Fox con el relativamente modesto presupuesto de 15 millones de dólares (1.620 millones de pesetas), y Patrick Bergin, un prometedor pero casi desconocido actor irlandés, en el papel del héroe.Desde 1909, las andanzas de este proscrito de los bosques han sido llevadas a la pantalla en más de 20 ocasiones y siempre con gran éxito comercial. Pero aun teniendo en cuenta la saludable popularidad del mito, que la industria cinematográfica se atreva a presentar ahora dos ofertas simultáneas parece un extravagante ejercicio de bravuconería; excesiva incluso para el legendario campeón de las mallas verdes.

En realidad, se trata tan sólo del resultado de una especie de pique entre compañías rivales. El productor Joe Roth encargó un guión sobre Robin Hood para Morgan-Creek Productions, pero cuando poco después decidió transferir sus servicios a Century Fox se llevó dicho guión con él. No queriendo ser menos, Morgan-Creek no sólo se hizo con un nuevo guión, sino que también se aseguró la prestación de Kevin Costner a cambio de 7,5 millones de dólares (8 10 millones de pesetas), embarcándose en una costosa producción, distribuida por Warner Brothers, que en circunstancias normales habría obligado al adversario más modesto a retirarse del juego. Sin embargo, la Fox decidió presentar batalla, combatiendo al gigante hollywoodense en su flanco débil, y puso su Robin Hood en manos de la productora independiente británica Sarah Radclyffe, acentuando la autenticidad inglesa de su proyecto.

Entre el barro

"Nos hemos pasado la mayor parte del rodaje", asegura Sarah Radclyffe, "con el barro hasta las rodillas filmando en el patio de un castillo real. El nuestro es un Robin Hood británico, adecuadamente investigado y penosamente realista. Prince of thieves es la versión de Hollywood".Por su parte, el equipo de Prince of thieves, consciente de que su gran reclamo es Kevin Costner, se ha podido permitir mayores licencias con la historia. El rodaje se realizó casi enteramente en los estudios londinenses de Shepperton y con las puertas cerradas para la prensa. Si bien Costner entró temprano en la pugna, afirmando -en unas declaraciones muy divulgadas- que para interpretar a Robin Hood se necesita a un "auténtico hombre". "Lo cierto es", añadió, "que a mí me encanta disparar flechas, montar a caballo, balancearme en los árboles y meterme en peleas".

A lo cual Patrick Bergin, que el pasado año se enfrentó con leones en Mountains of the Moon, no tiene reparos en replicar: "Aunque se precisa una cierta capacidad física para este papel, también es fundamental sugerir la dimensión moral del personaje de Robin Hood. Y lo que también se necesita es un cierto sentido histórico. He leído el guión de Prince of thieves y sin duda el nuestro es el más correcto históricamente. Por las fotos que he visto de la otra película, Kevin Costner está vestido como Mad Max".