La exposición 'Una historieta democrática' muestra el tebeo español más renovador
Setenta y seis originales, 92 libros y varias decenas de carteles de 19 dibujantes de tebeos españoles componen la exposición Una historia democrática, inaugurada ayer en el antiguo Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid (Juan de Herrera, 2). La renovación de la historieta en nuestro país en la democracia y la posterior ,aparición de publicaciones abiertas a la experimentación, son los conceptos que unifican las obras que componen esta muestra, que estará abierta hasta el próximo 30 de junio.
En la muestra se exponen los originales de dibujantes como Daniel Torres, Calatayud, Raúl, Federico del Barrio, LPO, Pedro Arjona, Gallardo, Max o Miguelanxo Prado, que desde 1977 han publicado sus historietas en revistas como Bésame Mucho, Cairo, El Vibora, Madriz o Medios Revueltos. Jesús Cuadrado, sociólogo de la cultura popular de masas y comisario de Una historieta democrática, asegura que el criterio seguido para la elección de estos autores es "el mismo que se tiene en el cine o la literatura para definir la idea de obra de autor; se trata de dibujantes con un concepto de la historieta distinto al de la estructura clásica y convencional".El funcional montaje de la exposición presenta cuatro originales de cada autor en una figura giratoria en forma de hexaedro, montados sobre un fondo de espejos que reflejan el resto de planchas.
Publicaciones
Una histonieta democrática se completa con la exposición de los libros, lálburnes de tebeos y publicaciones monográficas publicadas hasta este momento por los 19 autores, así como con una muestra de carteles realizados por estos dibujantes.El catálogo de la muestra incluye las reproducciones de los originales expuestos y textos teóricos y biográficos sobre los historietistas. Jesús Cuadrado reivindica que "por primera vez se ha conseguido realizar un catálogo idénticoal de otras exposiciones importantes de este museo".
De la totalidad de autores presentes en la muestra tan sólo tres viven exclusivamente de su trabajo en la historieta. El resto combina este medio con ilustraciones y chistes en la prensa diaria y colaboraciones en otros campos corno la publicidad, el diseño y la arquitectura. "Su trabajo se ha dispersado porque en estos rnomentos no hay mercado para la historieta de autor", sefiala Jesús Cuadrado.
La exposición Una historieta democrática no ha podido contar finalmente con los originales de Mariscal, Nazarlo, Pere Joan y Pons. A finales del pasado mes de febrero los tres primeros hicieron pública una carta en la que renunciaban a participar en la misma por Ia complicidad del Gobierno español en la guerra del Golfo. Por su parte, Pons argumentó su rechazo a la muestra por el desinterés que, según él, siempre ha mostrado el Ministerio de Cultura hacia la historieta.
