Masificación en las cárceles de Cataluña

La situación de las cárceles catalanas se caracteriza a grandes rasgos por la masificación de sus centros y por el mal estado en general de sus instalaciones más antiguas, según coinciden en apuntar diversas fuentes consultadas. Sin embargo, el Departamento de Justicia de la Generalitat, con competencias en esta materia, está realizando esfuerzos para paliar estas deficiencias poniendo en marcha nuevos penales. A finales de 1989, se inauguró la cárcel de La Roca con capacidad para 900 internos, y en este mismo ejercicio se hará lo propio con el penal de Can Bnians, en Sant Esteve de Sesrovires, que podrá acoger a 800 reclusos. Ambos centros están ubicados en la provincia de Barcelona.Cataluña dispone actualmente de nueve centros penitenciarios, de los cuales cinco están en Barcelona, dos en Lénida, uno en Tarragona y otro en Gerona, que acogen en total a una población reclusa próxima a las 5.000 personas.

De todos ellos, el que se encuentra en una situación más grave es la cárcel Modelo, ubicada en la misma ciudad de Barcelona, que alberga a unas 1.700 personas, pese a que su capacidad es de un millar. Justicia proyecta subsanar esa masificación -que suele derivar en múltiples incidentes entre funcionarios y reclusos o en motines- con la apertura de la prisión de Can Brians.