Tres autores levantinos
Ciclo de música españolaTres obras que deberían ser repertorio, como lo fueron ya en las décadas de los 30 y los 40, conformaron el cuarto y último programa de la Orquesta Nacional ha dedicado a la música española en un ciclo que tiene tanto de interés hacia lo nuestro como de apartheid para lo nuestro. Vino a dirigir Albert Argudo (Barcelona. 1945), actual maestro titular de la banda municipal barcelonesa y, de la Sinfónica del Vallés, para ofrecernos un tríptico de nacionalistas/impresionistas levantinos. Lo son sin duda Toldrá y Esplá y, en alguna medida, le, es también Montsalvatge, aunque tenga obras ajenas a tales, influencias.Por ejemplo, el Concierto, adjetivado de breve sin razón alguna y estrenado en 1953, que Enrique Pérez de Guzmán tocó ahora con auténtico primor. No es fácil la parte pianística de esta obra representativa del espíritu sintético, más que e ecléctico, del músico gerundense, pero Pérez de Guzmán la domina en gran virtuosista y la entiende con exactitud en los mil matices de un cosmopolitismo lleno de nobleza.
Orquesta Nacional de España
Director: A. Argudo. Solistas: E. Pérez de Gumán (pianista) y P. Pérez Íñigo (soprano). Obras de Toldrá, Montsalvatee y Esplá. Auditorio Nacional. Madrid, 10 de abril.
La ONE respondió bien aunque su parte es también difícil. Quizá, sobre el natural ajuste e identificación de ideas con el solista, habría sido necesaria en la orquesta una más detallada matización, lo que dicho con claridad quiere decir que no hubo los ensayos necesarios. El éxito de pianista, orquesta, director y compositor fue grande y Montsalvatge, en su habitual vestir de hombre del mar, saludó desde el pie del podio.
En Vistas al mar (1921) sobre poemas de Maragall, Toldrá expresó con transparente belleza sus impresiones de la Costa Brava a partir de las emociones líricas de Maragall en una página excelente nacida para cuarteto pero pronto extendida al conjunto orquestal de arcos.
La Nochebuena del diablo (1923), entre pictórica, lírica y dramática, constituye la fiesta belenística más bella que ha dado la música española. Paloma Pérez Íñigo canto los preciosos villancicos con propiedad y Argudo llevó toda la partitura con la más elogiable de las perfecciones, la de la naturalidad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Análisis de ajedrez | Joya rápida de David Antón en Catar
¿Repetir o pasar de curso? Algunos daños colaterales
Detenido en Chiapas Yoel Alter, integrante de la secta Lev Tahor, por presunta trata de menores para matrimonios forzados
Ayuso aprueba un gasto extra de 106 millones de euros para el “reequilibrio” económico de tres hospitales de Quirón en 2025
Lo más visto
- Maisa Hens, cantante: “Gracias al anuncio de El Almendro no tuve que volver a hacer un ‘casting”
- De celebrar el Gordo a temer no cobrarlo: la comisión de fiestas de Villamanín se dejó en casa un talonario vendido antes del sorteo
- Los socialistas valencianos reclaman a Feijóo que entregue a la jueza de la dana la conversación íntegra con Mazón
- “Un jardín con casa, no una casa con jardín”: así es la premiada vivienda de 146 metros cuadrados que se camufla con la vegetación
- Víctor Bermúdez, profesor de Filosofía: “Hemos perdido el control del proceso educativo, lo que damos en clase es en gran medida un simulacro”




























































