El alcalde de Belmonte sancionaba a los vecinos sin posibilidad de defensa
Carlos Bousoño López, secretario del Ayuntamiento de Belmonte de Tajo, declaró ayer en el juicio que se sigue contra el alcalde, José Luis Campo Morate, que éste carecía de competencias para imponer sanciones de la forma en que lo hacía. "¿Eran sanciones de plano, sin posibilidad de defensa para los administrados?", le preguntó el presidente de la sala, Juan José López Ortega. Y Bousoño reconoció que sí. En la sesión de ayer salieron a relucir otras presuntas irregularidades del regidor.
Tras el interrogatorio del secretarlo municipal y del ex comandante del puesto de la Guardia Civil de Colmenar de Oreja surgieron diversos aspectos de la actuación del alcalde belmontino que parecen indicar que éste se extralimitó en su celo perseguidor de infractores.Carlos Bousoño, que es secretario de la corporación de Belmonte de Tajo desde el año 1985, negó que aconsejara al alcalde la imposición de numerosas sanciones impuestas a Rosa Pérez por instalar su tendedero de ropa en la plaza del pueblo. El testigo, que fue sometido a un duro interrogatorio por parte de los tres miembros del tribunal, reconoció también que en el Ayuntamiento no hay comisiones informativas.
En otro momento, Bousuño acabó por aceptar que "en alguna ocasión" le ordenó el alcalde que no entregara diversa documentación que le requerían los concejales de la oposición, sin que José Luis Campo Morate justificara las motivaciones por las que no permitía el acceso de los ediles a dichos papeles.
"La mayoría de las sanciones las imponía el alcalde sin que yo me enterase de ello", dijo el secretario en otro momento de su declaración, lo que motivó que José Luis Campo se revolviese en el banquillo nervioso y contrariado.
Otra declaración comprometida para el procesado fue la del sargento Juan Sánchez, ex comandante del puesto de Colmenar de Oreja, que manifestó que el regidor le había pedido "en numerosas ocasiones" que denunciara a los vecinos presuntas infracciones de tráfico como si hubiera sido él quien presenció los hechos.
Nombres repetidos
El suboficial de la Guardia Civil, que se negó a los deseos de Campo Morate, añadió que entre los denunciados "había dos o tres nombres que se repetían".Muchos de los 22 testigos, entre ellos algún concejal, que ayer testificaron en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Madrid confesaron sentirse víctimas de la persecución del alcalde. Manuel Escamilla Morate afirmó: "El alcalde me crea problemas desde que mi yerno se presentó para alcalde para hacerle la contra a él".
Pedro Pérez Sánchez no tiene agua corriente porque se la cortaron cuando se negó a pagar la liquidación de todas las deudas que tenía contraídas con el Ayuntamiento.
